Lo de Guti es algo que siempre me dice mi padre. Antes de subir al primer equipo siempre me comentaba que el tío tenía una clase y un juego fabuloso, y es cierto, cuando le da la gana de jugar, porque es tremendamente irregular, capaz de hacerte lo mejor (sobretodo cuando los partidos se le ponen de cara), como de lo peor (faltitas estúpidas, broncas, etc.).
Ho!