Me da mucha vergüenza admitirlo porque soy muy honrado, pero fue algo que hice de pequeño, con unos 11 añitos y el año 1992 o principios del 93.
En esa época no tenía dinero para comprar juegos, mis abuelos me compraron la Mega Drive y me llevé 1 año jugando con el Sonic (sólo tenía ese
) pero un día en un centro comercial (diré un Corte Inglés) había un stand con la Mega Drive y el Street of Rage II.
Cuando lo vi no podía creerlo, era un juego de recreativa en la Mega Drive, era la bomba, unos personajes gigantes, una música de ensueño, graficazos, etc.
Era mediodía y en el centro comercial apenas había nadie, mis padres estaban comprando un colchón en otra sección y yo allí solo jugando. De pronto me acerqué al stand y vi que la carcasa de metraquilato estaba abierta y se podía coger el juego.
Un escalofrío me recorrió el cuerpo y en ese momento supe que tenía que llevarme esa joya. Saqué el juego de la consola, me lo metí en un bolsillo y salí medio tambaleándome y con mareo de El Corte Inglés, cuando ya estaba cerca de la puerta vi un guardia y me puse muy nervioso. Seguí mi camino hacia la puerta y pude cruzarla, cuando ya estaba en la calle no podía creérmelo, era como un sueño, el juego era mío.
Nunca olvidaré esa sensación, entre emoción, miedo, adrenalina y a la vez alegría.
En uno de los jardines cercanos escondí el juego y volví al centro comercial en busca de mis padres.
No veas que vicios me pegué, son recuerdos imborrables. Jamás se me ocurriría robar hoy en día, nunca más he vuelto a hacerlo.
Pero en esa época de sequía videojueguil, tener Street of Rage II en casa era como un sueño inalcanzable.
PD: Robar está mal, muy mal, no lo hagáis en casa.