Bueno gente, ya vemos perfilando para la cama
ralph, parte de mi historia se parece, mi abuelo materno hizo muchas veces de padre para mi. Es raro cuando te identificás, entendés, con una sola persona, y ésta, deja de estar, ni siquiera avisando, cosa de un fin de semana.
Nunca me había tocado pasar por eso, y la vez que me tocó, eligieron a la persona que más necesitaba en ese momento. Fue duro, es duro, muchas veces sueño con volver a encontrarlo. Mi abuelo me veía, y sabía qué me pasaba, algo que mis padres no lograron.
Caí mil veces, caigo mil veces, desde que no está, se terminaron mis salidas divertidas, se terminaron mis ganas de muchas cosas, pero empezaron ganas de otras. Después de muchos años, me di cuenta, que lo encuentro todos los días, en mis pensamientos, en mis recuerdos, en el espejo. A veces lo sueño, y me devuelve la sonrisa.
Imagino que en cierta forma, si los momentos fueran eternos, no se disfrutarían de la misma forma. Que todo este circo, sea efímero, es lo que le da sentido.
Tardé más de 20 años en entender una de las cosas (para mi) más importantes de la vida; disfrutar. Eso no quiere decir vivir como si fuera el último día, ni mucho menos, de hecho, eso me parece una cag. Aprendí a disfrutar de algo más importante, de cosas que en principio o a simple vista, no se pueden disfrutar.
Buenos días para los madrugares!