La soledad nuevamente golpea mi puerta, salgo corriendo, no quiero que me encuentre.
Salto por la ventana, miro al cielo, una nube gris cubre la noche.
Sigo escuchando los golpes, no quiero mirar atrás, sigo corriendo, los golpes se escuchan más fuerte.
Tengo miedo, ya no soporto, corro tan rápido como puedo, me falta el aire, me tiemblan las piernas pero igual no me detengo, siento frío, no hay nadie a mí alrededor.
derepente ya no se escucha, siento alivio, creo que la evadí, vuelvo a casa, todo parece normal, pero...
no hay nadie...
me falta algo...
creí que la primavera traería la Flor del Rocío
pero no.
De nuevo los golpes
entro en pánico, no se que hacer, busco un cuchillo...
los golpes se detienen
mis ojos se convierten en mar, mi garganta en sollozos y luego en llanto de dolor...
tengo miedo de lo que me pueda llegar a hacer.
En lo que me pueda pasar...
...el día de mañana, en el que yo solo sea un recuerdo, una foto, un consejo, alguien a quien llorar...