Tres armaduras Magitek, caminando bajo la nieve, de noche, mientras suena de fondo una de las más preciosas composiciones de Uematsu, avanzando hacia una montaña, hacia un pueblo llamado Narshe, tras conocerse que toda magia y resquicio de ella fueron borradas en una cruenta guerra que asoló al mundo y a los corazones de la gente, tras conocer que dos de los ocupantes de esas armaduras van tras algo que parece ser de orígen mágico, mientras que la silenciosa tercera ocupante mantiene un silencio y mirada tan fríos como la nieve que cae, en la fría noche, en el largo camino...
Misterio, magia, eso es la intro de Final Fantasy VI.