Bueno, pues tras unas horitas trasteando tengo que decir que continúo cagándome en el iTunes, la sincronización y la madre de Steve Jobs, y me reafirmo más aún en lo que he dicho antes: un hardware flipante una maravilla de la tecnología, responde super suave, va rapidísimo y es comodísimo, peeeero es un suplicio el puto iTunes y la madre que lo parió.
Por suerte ya tengo el iPad jailbreakeado y funcionando a full y ya no dependo del iTunes para instalar aplicaciones, pero aún tengo que sincronizar todos los putos contenidos. Qué suplicio, madre.
Supongo que los veteranos del iPod y el iPhone se descojonarán de ésto, pero es que lo veo una tortura totalmente inútil e innecesaria. Solo espero que las máquinas de café del despacho de Steve Jobs también tengan iTunes y cada vez que el calvo barbudo vaya a sacarse un café con leche lo tenga que estar sincronizando y haciendo polladas varias hasta que el jodido café le salga más frío que el chocho de la duquesa de Alba.
Al aparato en sí solo le pongo una pega: es un puto espejo. En exteriores no penseis usarlo para otra cosa que no sea afeitaros o sacaros pelotillas de la nariz e incluso en el interior tiene unos reflejos bastante brutales. Bueno, y si creíais que la PSP era un imán para las huellas de los dedazos esperad a ponerlos sobre un iPad
. Por lo demás es una jodida maravilla.