PS5 y Xbox Scarlett utilizan una GPU AMD Radeon RDNA de segunda generación Durante los últimos días hemos tenido la oportunidad de confirmar que
Xbox Scarlett vendrá con hardware dedicado a trazado de rayos, una noticia tan importante como interesante que nos lleva a pensar que
PS5 hará lo propio. La razón es muy sencilla, y es que sería un
«suicido» por parte de Sony dejar sola a la competencia al prescindir de dicha tecnología.
Puede que alguno de nuestros lectores crea que no es un tema tan importante, pero recordad lo que ocurrió con
PS4 y Xbox One. Desde el principio quedó claro que la primera era más potente que la segunda, y esto le hizo generar un mayor interés entre los consumidores y le ayudó a ganar la
«guerra» de la generación actual de consolas.
Como dijimos en su momento este dato es prácticamente una confirmación de que
PS5 y Xbox Scarlett vendrán equipadas con una
GPU Radeon RDNA de segunda generación, ya que será dicha arquitectura la que contará con hardware dedicado a trazado de rayos. En la imagen adjunta, extraída de una hoja de ruta de AMD, podemos ver que esa era, de hecho la gran evolución que tenía programada la firma de Sunnyvale para su próxima generación de soluciones gráficas.
Es
una buena noticia, ya que sugiere que el trazado de rayos se acabará estandarizando y que
la predicción de NVIDIA de que el primer juego con dicha tecnología obligatoria llegará en 2023 podría no solo cumplirse,
sino incluso adelantarse. Entiendo a la perfección existe un fuerte recelo alrededor de dicha tecnología, sobre todo por su enorme impacto a nivel de rendimiento y por el golpe que puede suponer a nivel de obsolescencia para las tarjetas gráficas que no cuenten con hardware dedicado para trazado de rayos, pero no es la primera vez que la industria pasa por esta situación. Estoy convencido de que nuestros lectores más veteranos recordarán
la transición al T&L. PS5 y Xbox Scarlett con trazado de rayos, pero parcial Sí, ambas consolas soportarán dicha tecnología, pero esto no quiere decir que vayamos a ver juegos renderizados por completo mediante trazado de rayos. Actualmente la técnica que se utiliza en juegos triple A parte de un
renderizado híbrido en tres niveles: rasterizado, trazado de rayos y reescalado inteligente.
El uso de técnicas como el DLSS, que reduce la resolución nativa
reescalando la imagen, ha conseguido resultados muy buenos en algunos juegos, y consigue reducir el impacto del trazado de rayos a nivel de rendimiento. Es una solución que podríamos ver extendida, de una forma u otra, a las consolas de nueva generación.
Estaremos atentos a ver qué nuevas tecnologías incluyen PS5 y Xbox Scarlett para
«domar» el trazado de rayos, pero en cualquier caso lo importante es que su aplicación será limitada, es decir, partirá de la misma base que hemos visto actualmente y se aplicará únicamente a mejorar aspectos concretos en juegos, como los reflejos y los efectos de luces y sombras.
Faltan muchos años para que tengamos
un hardware capaz de renderizar por completo bajo trazado de rayos un juego triple A. La prueba la tenéis en Quake 2 RTX, un título que impresiona por el uso que hace de dicha tecnología, pero que tiene una base técnica de finales de los noventa. A pesar de ello es tan exigente que ni siquiera una RTX 2070 ofrece una experiencia verdaderamente óptima.
Fuente:https://www.muycomputer.com/2019/09/15/ps5-y-xbox-scarlett-utilizan-una-gpu-radeon-rdna-de-segunda-generacion/El video:
https://www.youtube.com/watch?v=fzPo7gu-fTwFuente:https://www.eurogamer.net/articles/digitalfoundry-2019-teraflop-face-off-current-gen-vs-next-gen