Me lo acabo de terminar y me ha encantado. Es cierto que las mazmorras no son muy complicadas pero la entrada a alguna de las final sí que tiene su miga y conseguir el traje rojo / azul, las dos mejoras de la espada, todos los bebés y demás aún lleva su tiempo.
Me ha gustado mucho, tenía ganas de un Zelda con la perspectiva isométrica con la que me lo pasé también en GB. He vuelto a sentir esa sensación de "he conseguido el objeto X, ahora igual puedo coger aquel bebé de la zona Y". Además el tema de transformarse en pintura cambia un poco las mecánicas y da un soplo de aire fresco.
Por último también me ha gustado mucho el tema artístico.
En resumen: Pese a no ser el Zelda más exigente, me lo he pasado como un enano.
Saludos