Tras llevar desde los 16 años fumando sin parar ni un sólo día (ahora tengo 22 años), me he hartado mucho pero mucho de seguir atada a este vicio.
He tenido 2 intentos de dejarlo: el primero aguanté 3 días y el segundo aguanté 5. En ambos me fumé el último cigarrito sabiendo que sería el último, lo hice con convicción y totalmente mentalizada. El problema es que me venía abajo a mitad del camino. Y volvía a fumar, sabiendo que no debía, que ni siquiera QUERÍA realmente encenderme de nuevo un puto cigarro. Sabe mal y huele aún peor, puaj!
Era como si estuviera en piloto automático y mientras observaba cómo iba liándome el cigarro, poniéndomelo en la boca y encendiéndolo, en mi mente se encontraban dos pensamientos contrarios: "qué cojones estoy haciendo si yo no quiero esto" a la vez que "qué coño, si dejarlo es fácil, me fumo un par y lo dejo otra vez como si nada".
JÁ!
A partir de ese momento cargado con una profunda vergüenza y decepción por fallarme a mí misma siendo consciente de ello, fumaba no 2... sino 20! Como si no hubiera mañana! Horrible!
Me quita la libertad totalmente. No me gusta no poder controlar mi mente sabiendo que puedo hacerlo si me lo propongo. Es increíble lo que te autoengañas por culpa de tener esta adicción.
Si lo piensas, fumar es única y exclusivamente perder el tiempo y la salud. Una estupidez supina. Verlo y/o sentirlo como un placer es solamente una (falsa) percepción creada por la necesidad de nicotina para calmar el mono.
Escribo esto con el fín de usarlo como apoyo cuando esté a punto de fumar. No me gustaría escribir que "he vuelto a fumar". Sería tremendamente humillante.
Si alguien está en mi misma situación y necesita apoyo aquí tiene un hilo para expresarse libremente.
A la mierda el tabaco.