No os lieis con el levantamiento de la inmunidad. Es un mero trámite que habilita a la justicia belga a examinar las euroórdenes (que acabará desestimando).
La votación tiene una doble lectura: ha habido mayoría absoluta para levantar la inmunidad, pero esa mayoría absoluta es de las más raquíticas que se recuerdan. Esto revela el mercadeo político que (siempre) tiene lugar en una institución política, como es natural, y no debe sorprender a nadie.
Aquí la "batalla" de verdad se dirimirá en las cuestiones prejudiciales que el TS plantee ante el TJUE y, más adelante, en el TEDH. Hasta entonces, todo son minucias que no tienen ninguna relevancia real.
PD. Y no esperéis que el TJUE dé una respuesta contundente a las cuestiones prejudiciales. Le gusta mucho fallar cosas como "queda a la decisión de la autoridad judicial nacional decidir que..." y no responder a nada de lo que se le ha planteado. Esto puede ocurrir, y llevaría a todas las partes a la casilla de salida.