La ola de adquisiciones que Microsoft puso en marcha hace unos años tenía múltiples objetivos, y uno de ellos era ni más ni menos que Square Enix, una de las más insignes compañías japonesas. Esta información ha salido a la luz gracias a los documentos internos que
se han publicado como parte del juicio que enfrenta Microsoft con la FTC. Hace unos días descubrimos que en la lista de la compra de la tecnológica estadounidense también figuraban entre otros los nombres de
Sega, Bungie, IO Interactive y Supergiant Games.
Según la documentación, en 2019 Microsoft tenía en marcha el Project Phoenix, nombre bajo el cual se conocía la operación de compra de Square Enix. Phil Spencer, director ejecutivo de Microsoft Gaming, y otros altos cargos de Xbox, tenían varios motivos para abordar esta operación. En su opinión, Square Enix le daría a Microsoft una presencia en Asia, una región en la que históricamente no ha encontrado él éxito, y añadiría más valor y crecimiento a Game Pass gracias a los lanzamientos y catálogo de juegos de la compañía japonesa.
Además de valorar las tres principales franquicias de Square Enix, que para Microsoft eran Final Fantasy, Dragon Quest y Tomb Raider, la tecnología también menciona a Kingdom Hearts y Deus Ex, así como el catálogo de juegos que atesora la compañía tras más de 30 años en el negocio. Microsoft consideraba que los títulos del catálogo de Square Enix tenían la capacidad de sumar nuevos suscriptores y retenerlos. Otra de las razones por las que Microsoft se fijó en el editor japonés fue ganar peso en el sector de los juegos para móviles.
En el documento Microsoft dice que la compra de Square Enix podría ayudar a crear una versión de Game Pass solo para móviles. Eso fue en 2019 y a día de hoy Game Pass solo tiene soporte para Xbox y PC. Nada de móviles, como mínimo de momento. Por otro lado, sabemos que la compañía planea llevar la
Xbox Store a los móviles para competir con Google y Apple. Cuando Microsoft anunció el acuerdo para hacerse con Activision Blizzard, ya dijo que la compra estaba en parte motivada por su interés para crecer en el sector móvil. Activision Blizzard es la matriz de King, el desarrollador responsable de Candy Crush.
No sabemos si Microsoft llegó a sentarse a la mesa con Square Enix para hablar sobre la compra, que de haberse materializado hubiera producido un gran impacto. Lo que si podemos confirmar es que final la compañía elegida fue Activision Blizzard. Por su parte, Square Enix se mantiene como una compañía independiente con una muy buena relación con Sony como demuestran las exclusivas en consola de Forspoken y Final Fantasy XVI.
Fuente: The Verge