Con la españa campeona del 2010 hicimos un mundial 2014 de auténtica vergüenza. Del 2018 no voy a decir nada.
No es la calidad de los jugadores, es la actitud. He entendido que no quisieran arriesgar contra marruecos en la primera parte porque estaban muy entusiastas, pero en toda la segunda parte han seguido igual.
Llevamos 12 años viendo como cada rival emplea la táctica de poner el autobús en la portería, y chocándonos una y otra vez por culpa de eso, 12 AÑOS. Yo estoy un poquito hasta los cojones ya.