Ross Ulbricht, fundador y responsable de Silk Road, ha sido condenado a cadena perpetua después de ser declarado culpable de delitos de narcotráfico y blanqueo de dinero entre otros cargos. Ulbricht se enfrentaba a una sentencia mínima de 20 años, pero no existía posibilidad de pena de muerte, por lo que una vida en la cárcel ha sido el castigo más severo posible. También supone una condena sin precedentes en la lucha contra los delitos que se cometen a través de Internet.
“Usted no es mejor persona que cualquier otro vendedor de drogas. Su educación no lo hace diferente, lo hace más inexplicable”,
dijo la juez Katherine B. Forrest. "Que quede claro. Nadie está por encima de la Ley, ahora debe pagar el precio".
Los cargos de Ross Ulbricht, también conocido como Dread Pirate Roberts, derivan de su gestión de Silk Road, un mercado negro en la web profunda que utiliza el supuesto anonimato que otorga Tor y los pagos en Bitcoin para crear un bazar de drogas, medicamentos y todo tipo de servicios o productos al margen de la ley. Cuando el FBI
cerró Silk Road en 2013 este era el mayor mercado de este tipo, y los intentos posteriores para revivirlo
quedaron frustrados.
La fiscalía estima que Silk Road movió unos 200 millones de dólares en transacciones de drogas, cifra que jugó un papel clave en la sentencia de la juez Forrest. Durante el proceso las pruebas presentadas revelaron que Ulbricht obtuvo un beneficio personal de 18 millones de dólares, casi un 10% del dinero ilícito que se movió en 1,5 millones de transacciones.
"Desearía regresar atrás en el tiempo y convencerme a mí mismo de tomar un camino distinto. Arruiné mi vida”, escribió Ulbricht en su carta para pedir clemencia. “Si me hubiera dado cuenta del impacto que la creación de Silk Road tenía en la gente que más quiero, nunca lo hubiera creado”. Los abogados de Ulbricht piensan apelar.