peprimbau escribió:Desencripto varias cosas de este post.
Hay muchos "cozumelievers" y también "cozuhaters" y en este último caso al no poder replicar por haberse cancelado la cuenta, pues...
Antes que él estuvieron DevilKenMasters, VirtuaNestor o AES, por citar a algunos usuarios "célebres", por llamarlos de alguna manera.
La diferencia es que ellos lo fueron por sus aportaciones, mientras que Cozumel representa la hipocresía, el doble rasero y unas habilidades sociales cuestionables por parte de la comunidad.
Es inexplicable que haya gente que tenga una cruzada contra personas que exhiben los juegos que se compran por ser caros, o por adquirir títulos por su rareza, pero aplaudan a alguien que tenía puesto la cantidad de juegos de su colección en su firma, que se jactase constantemente de lo barato que compraba (y por ende, lo tontos que eran los demás por pagar tanto), que a menudo hiciera alusión al tipo de vida que llevaba, y sobre todo, alguien que compraba al peso para seguir aumentando ese número de la firma, que a fin de cuentas, es lo que le daba reputación.
Para darse cuenta de esto último no hacía falta contar con las habilidades detectivescas de Sherlock Holmes, sino que bastaba con leer sus impresiones de los juegos, que parecían sacados de una plantilla de Mobygames: excelentes gráficos, jugabilidad a prueba de bombas y muy divertido. Tampoco se le veía resolver dudas que implicasen el conocimiento profundo de cualquier juego. Básicamente, hacía lo mismo que todos esos anticristos a los que se les acusa de postureo, lameprecintos o estanteristas, pero en cutre, es decir: coleccionaba precios bajos y se hacía erigir como una especie de representante de ese coleccionista nostálgico y puro, que compra solo por amor y con intención de acabarse los juegos. Sí, ese que se compra un juego de Mahjong por nostalgia o un Final Fantasy V en japonés, que fue el que llegó exactamente a su barrio.
Unos te llaman compi en un foro, otros te dicen crack en un vídeo, pero lo cierto es que son comportamientos que únicamente buscan ensalzar su ego y destacar su figura virtual mediante el engatusamiento, la mentira y el hacer creer. Porque la realidad es que nadie los conoce personalmente, no te van a contestar nunca a un mensaje privado, a fin de cuentas, suelen ser sociópatas, interesados o personas mezquinas. No vas a saber nada que ellos no quieran contar a través de Internet, y que suele ir ligado directamente a su reputación virtual.
Y es ahí donde quiero ir. No es cuestión de cozubelievers o cozuhaters, sino de una comunidad dividida entre personas en contra de estas actitudes nocivas y egoístas que solo consiguen crear gurús de Hacendado; y por otro lado a los que se la meten doblada, piden recogidas de firmas para el retorno de estos seres de luz y acaban defendiendo (incluso elogiando) este tipo de comportamientos.