Bueno no tenía pensado jugar a The Last of Us 2 tan pronto, pero viendo que era imposible escapar de posibles spoilers decidí jugarlo ya. A mi el juego me ha gustado, me parece mejor que la primera entrega, con una jugabilidad más completa y una historia más valiente de contar que escapa de los clichés más típicos del género. Y aunque me haya gustado más que la primera entrega, esta segunda parte cuenta con errores que ni por asomo se encontraban en el anterior.
Para mi el mayor problema que tiene el juego es su propia estructura, no sabe medir los tiempos. Había zonas super largas que no aportan nada y de golpe secciones donde se hacía avanzar la historia duraban un suspiro. No sé, noté como que no había un equilibrio bien definido entre jugabilidad e historia. De hecho, creo que no es solo impresión mía de que el juego se siente estirado por alguna razón que no acabo de entender.
Otro de los problemas que encontré fueron los tramos jugables centrados en la historia. Se limitaba la acción y eran super lentas, y a mi por lo menos me cortaban el ritmo del juego totalmente. Esto no sería un problema si fuesen dos o tres, pero había muchas. Creo que si me lo hubieran contado con cinemáticas esas secciones me hubiera quedado igual pero se me habría hecho más llevadero.
Y para no cebarme mucho, también pienso que la narración era rocambolesca con todas esas idas y venidas. Ellos mismos entorpecían lo que querían hacer llegar al jugador, aunque finalmente lo consigan.
De hecho quiero destacar el sentimiento que tuve en dos momentos del juego que demuestran la gran fuerza que tiene la historia: En el enfrentamiento del cine no quería matar a Ellie y en el enfrentamiento final no quería que Ellie matase a Abby.
Y algo aparte de esta pequeña crítica, yo si pienso que un The Last of Us 3 es posible. No murieron todos los protagonistas, es más, los más jóvenes son los que sobreviven. A lo largo del juego se ha formado a Abby como un personaje sólido y sigue con vida y con una misión. Y esa secta torturadora (tramo que también da para hablar) del final nos enseña que hay mucho todavía que contar fuera de Seatle.