Bueno, en defensa de aquellos que aguantan una infidelidad tengo que decir algo: cuando se quiere, y si se quiere mucho, pesan más las ganas de seguir estando bien.
Hay muchos tipos de cuernos. Puedes dejar a tu novio porque habla mucho con una por el messenger? Puedes dejarle porque hable por teléfono con ella? Le dejarías si ha besado a otra? Y si estaba muy borracho y una le entró?
Creo que hay atenuantes, y en muchos casos es la cornuda quien los encuentra y así puede disculparlos. A mi me han perdonado ser infiel, aunque lo confesé un día cuando ya no salíamos, sé que me perdonó porque luego volvimos a salir.
Por eso, yo tampoco sé bajo qué circunstancias podría llegar a perdonar una infidelidad. Sé que podría perdonar. Nunca olvidaría. Y puede que si no lo olvidas eso sea un veneno que mate la relación. O no.
Arriesgarse, como al entrar a una amiga, como al hablar de sexo sin tapujos y no saber si los que escuchan se escandalizarán y dirán algo, si se callarán pensando que eres un gilipollas (o algo peor) o si seguirán la conversación con naturalidad, como la has abierto tú...
Arriesgarse o no. Según lo que creas que vas a ganar, verdad?