Voy a comentar cosas generales que se ha ido hablando en las últimas páginas, porque llego tarde a todo
El primer punto es que el juego revoluciona el género de los open world. No reinventa la rueda, pero le añade dirección asistida, tracción y función turbo. Con los Elder Scrolls tenemos un juego donde los enemigos escalan a nuestro nivel, pero es que aquí los enemigos escalan a nuestra forma de jugar y no sólo eso, es que somos nosotros como jugadores los que aprendemos del juego, lo que nos permite pasarnoslo cuando queramos si la habilidad nos da para ello. Ni corazones, ni resistencia, ni nada. Sólo necesitamos habilidad, el resto es mera ayuda.
Después, en este no lo se, pero BotW no tenía post-game de verdad (si no recuerdo mal sólo había 2 cosas desbloqueables al derrotar al jefe final: Comprar fotos de los jefes y los Lynels dorados en el modo difícil). Es decir, todo el contenido del juego era disfrutable desde el principio. Y no era poco precisamente.
También he ido leyendo muchos mensajes sobre farmeo del inicio, farmear para llegar a X punto pronto, etc etc... Obviamente la libertad que ofrece el juego permite hacer esto sin problemas, pero realmente no es necesario en absoluto (especialmente al principio). Hay tantísimas cosas que hacer, tantísimo que explorar, que no me parece necesario estar farmeando al principio. Quien disfrute haciéndolo, adelante, pero había gente quejándose de llevar muchas horas farmeadas al inicio... Sólo decir que eso, creo que no es necesario dedicar las primeras horas al farmeo de nada.
Conforme se avanza en el juego habrá muchas cosas que se faciliten o ni haga falta estar peleándose por ellas, dejando el farmeo inicial como algo que no hacía falta.
Y por último, a mí personalmente no me estaba entusiasmando el reciclaje del mapa. Si, con tanto cambio seguía disfrutando ir por él, descubriendo las cuevas, etc etc. Pero no me motivava como lo hizo BotW. Sin embargo dicha emoción de descubrir cosas nuevas y ver cómo llegar a los puntos deseados me la han estado ofreciendo los otros mapas.
El cielo es todo un puzzle de ver cómo llegar a algunas zonas, y el subsuelo a parte de ello es la hostilidad del entorno. Y todo ello lo ando explorando únicamente con las herramientas que encuentro a mano, ya que recurrir a "la moto voladora" no me motiva para usarla de forma general.
Si llevo pocas horas de juego es por disponibilidad, el juego me está enganchando tantísimo como lo hizo BotW en su día en Wii U, y en la 2ª partida que eché años después en Switch. Encantado con el juego, vamos.