El otro día jugue de nuevo a un título que me tuvo enganchadisimo en la psx. Os sonará. Se llama, medalla de honor. Y no había nada parecido. Yo alucinaba a pesar de que cada vez que me acercaba a un árbol o arbusto, se veia unos pixeless brutales, cuadros y cuadros enormes en tu cara. O el colin mcrae, que ahora veo el pop up y me descojono, pero en su momento fue una pasada.
En esa epoca ni se me ocurría pensar en resoluciones ni pollas, sencillamente disfrutaba jugando.
Ahora parece que la gente solo acepta jugar si las imagenes desprenden excelencia solamente. Nos hemos vueltos locos?