Durante cerca de una década Neil Gaiman y Terry Pratchett trabajaron juntos con el objetivo de adaptar Good Omens (Buenos Presagios), la novela en la que ambos colaboraron y que originalmente fue publicada en 1990. Primero se habló de una película en la que estuvo implicado Terry Gilliam, después de una serie. De ninguno de los proyectos llegó a trascender nada tangible, pero todo cambió en 2014 cuando Pratchett, enfermo de alzheimer, envió una carta a Gaiman donde le instaba a completar el proyecto “antes de que se apaguen las luces para mí”. Pratchett murió un año después, pero Gaiman se había comprometido con su amigo, así que decidió seguir adelante con el proyecto al que Amazon dio luz verde.
“Tardé 18 meses en escribir los seis capítulos, reinventándolos para la televisión, mientras trataba de mantenerme lo más fiel posible al original, porque teníamos millones de personas que me matarían si no lo hacía, pero a la vez quería sorprender”, dijo Gaiman durante un evento organizado por Amazon en Londres en octubre de 2018. El escritor también reconoció haber tomado ideas de la frustrada película y de una inédita secuela de Good Omens en la que había trabajado junto a Pratchett. Entre las novedades respecto a la novela tenemos una mayor aparición del arcángel Gabriel interpretado por Jon Hamm (Mad Men). Pero estas nuevas ideas no nacen para estirar el chicle, Good Omens es una miniserie con un principio, un desarrollo y un final.
Good Omens nos sitúa en un mundo al borde del apocalipsis mientras la humanidad se prepara para su jucio final. Sin embargo, desde el inicio de la creación humana en la Tierra han vivido Crowley (David Tennant) y Azirafel (Michael Sheen), un demonio y un ángel que representan el infierno y el cielo, respectivamente. Después de varios siglos ambos se han acostumbrado a vivir en la Tierra, lugar al que han llegado a querer y que no quieren ver destruido. A pesar de que representan polos opuestos, ninguno de los dos ve con entusiasmo el fin del mundo, así que deciden aparcar sus diferencias para colaborar y evitar la llegada de los cuatro jinetes, la venida del Anticristo y el posterior apocalipsis.
Para lograrlo deberán buscar al Vástago de Satán, un niño de 11 años al que han perdido de vista y que sin él saberlo será el causante del armagedón. Good Omens no solo trata de la aventura que vivirán Crowley y Azirafel en su objetivo de evitar el fin del mundo, además estamos ante una historia de amistad y de fe en la humanidad, con grandes raciones de humor, cinismo e ironía. En el reparto de la serie también encontramos a Frances McDormand (Tres anuncios en las afueras) como la voz de Dios, Benedict Cumberbatch (Sherlock) como la voz de Satán o Anna Maxwell Martin y el mencionado Jon Hamm como los dirigentes de las fuerzas del Infierno y el Cielo, respectivamente.
Good Omens estará disponible el viernes 31 de mayo en Amazon Prime Video.
La madrugada del 26 de abril de 1986 el reactor 4 de la central nuclear Vladímir Ilich Lenin, situada a 3 km de Pripyat, explotó durante una prueba de corte eléctrico. En ese momento se consumó el accidente de Chernóbil, catalogado como el más grave en la escala INES (International Nuclear Event Scale) y uno de los mayores desastres medioambientales de la historia provocado por el hombre. Nunca antes había ocurrido nada igual. Nunca antes la humanidad se había enfrentado a un estallido masivo que liberó materiales radiactivos en Bielorrusia, Ucrania y Rusia (que para entonces formaban parte de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas), así como en zonas de Escandinavia y hasta 13 países de Europa Central. Todo lo que pasó esos días es lo que busca explicar la miniserie de cinco capítulos Chernobyl, que HBO pondrá en marcha el martes 7 de mayo.
El primer episodio de Chernobyl, titulado 1:23:45, nos sitúa justo después de que el reactor de la central nuclear haya sufrido dos explosiones, que llegaron precedidas de 24 horas de manipulaciones torticeras y más de doscientas violaciones del Reglamento de Seguridad Nuclear de la Unión Soviética. Los espectadores estaremos principalmente guiados por Valeri Legásov (Jared Harris), un científico soviético que saltó a la fama por su trabajo a cargo del comité de investigación del desastre de Chernobyl. Él fue una de las primeras personas que alertó sobre la gravedad del accidente. Además, no se limitó a informar desde la distancia, ya que al igual que los otros miembros de la comisión llegó a pisar el terreno y se expuso a altas dosis de radiación.
Otra de las protagonistas de Chernóbil es la física nuclear soviética Ulana Khomyuk (Emily Watson), un personaje inventado para la ocasión pero tras del cual se busca representar al gran número de científicos que no se creyeron los informes oficiales y se pusieron a investigar qué había sucedido realmente. Ulana visitará hospitales para entrevistar a los hombres y mujeres que se adentraron en el accidente nuclear y que se jugaron la vida al exponerse a altísimas dosis de radiación. La desconfianza de los científicos estaba justificada, ya que los honestos informes de gente como Legásov fueron suavizados por el gobierno soviético, que inicialmente quiso rebajar la extrema gravedad del incidente.
Esa parte política recae en el personaje de Boris Shcherbina (Stellan Skarsgård), viceprimer ministro soviético de la época, al que se le encomendó la tarea de controlar y dirigir la alarma que encendió el accidente. Será él el encargado de enfrentarse a las verdades y realidades que por un lado quiere publicar Legásov y que por otro descubre por sí misma Khomyuk.
Pero la historia de Chernóbil no se puede explicar sin los liquidadores, una legión de más de 500.000 personas que acudieron a la central nuclear para minimizar las consecuencias del desastre. Estamos hablando de bomberos, científicos, especialistas de la industria nuclear, ingenieros de minas, geólogos y mineros de uranio, así como tropas terrestres y aéreas preparadas para la guerra atómica. No eran necios llevados a la muerte, fueron voluntarios (a excepción de los militares) que sabían a lo que se enfrentaban: exposiciones de 20.000 roentgens / hora (la exposición de 500 roentgens en un periodo de 5 horas suele ser letal para los humanos). Para evitar la muerte en pocos minutos trabajaron en turnos, sin embargo, miles perdieron la vida y muchos más quedaron discapacitados.
A día de hoy el reactor 4 de Chernóbil está protegido bajo un sarcófago cuyo tamaño es comparable al de un campo de fútbol, y en sus alrededores se sigue trabajando para desmantelar el resto de la central. Las ciudades cercanas como Pripyat, que hemos podido ver en algún que otro videojuego, son lugares fantasmales. Sin embargo, hay vida dentro de la zona de exclusión de 2.600 kilómetros cuadrados. Humanos y animales han vuelto a ocupar su lugar, pero se siguen exponiendo a niveles de radiación que multiplican hasta cinco veces el límite oficial del gobierno ucraniano (12 en el caso de los niños).
Entre gran parte de la audiencia de Netflix parece que funcionan los dramas adolescentes y una muestra de ello la encontramos en series como Élite, On My Block, Por 13 Razones o Las escalofriantes aventuras de Sabrina. En este sentido, la nueva apuesta de la plataforma de streaming se llama The Society. Estamos ante una serie inspirada en El señor de las moscas, la conocida novela de William Golding publicada en 1954, que tiene como director y guionista a Christopher Keyser, cocreador de Cinco en familia (Party of Five, 1994). La primera temporada de The Society estará disponible al completo el viernes 10 de mayo.
The Society sigue a un grupo de adolescentes que misteriosamente son transportados a una copia prácticamente exacta de la rica ciudad de New England en la que vivían, pero sin dejar rastro alguno de sus padres. Los jóvenes deberán descubrir qué les ha sucedido y cómo encontrar el camino de regreso a casa, pero pronto se darán cuenta que la ausencia de adultos, normas y límites tiene secuelas. En consecuencia nuestros protagonistas también se verán obligados a establecer un orden y forjar alianzas, dos elementos imprescindibles para sobrevivir a lo que inicialmente parecía una utopía juvenil.
Esta versión moderna de El señor de las moscas cambia el accidente de avión en una isla desierta por una misteriosa teletransportación masiva y aislamiento en un bonito y prospero pueblo. Además, en The Society parece que estamos ante un grupo de ricos adolescentes, que se ponen violentos y empuñan armas vestidos con la ropa de su hermandad. En la obra original de Golding los personajes representan ideas, sistemas políticos y comportamientos humanos. El objetivo del autor es ofrecer una representación de la naturaleza humana, pero está por ver si la obra de Netflix puede (o quiere) ofrecer una complejidad similar.
En el reparto de The Society encontramos a Kathryn Newton (Big Little Lies), Rachel Keller (Legión), Grace Victoria Cox (La cúpula), Sean Berdy (Cambiadas al nacer), Alex Fitzalan (Slender Man) o Toby Wallace (Romper Stomper). En la producción ejecutiva encontramos a Christopher Keyser acompañado por Marc Webb (Crazy Ex-Girlfriend, The Amazing Spider-Man).
Hora de saber qué series han sido renovadas y canceladas durante el último mes.
- Renovadas: The Umbrella Academy (T2), After Life (T2), Hanna (T2), Killing Eve (T3), Future Man (T3 y última), Barry (T3), Preacher (T4 y última), Navy: Investigación criminal (T17), Good Girls (T3), Manifest (T2), Last Man Standing (T8), NCIS: Los Angeles (T11), NCIS: New Orleans (T6), The Good Fight (T4), Warrior (T2), All American (T2), Roswell, New Mexico (T2), In the Dark (T2), Los 100 (T7), On My Block (T3), Empire (T6), Cobra Kai (T3) y Black-ish (T6).
- Canceladas: The Gifted, Santa Clara Diet, The Chi y Arde Madrid (por decisión de sus creadores).
