La maltrecha Atari ha comunicado el cierre de sus estudios en Santa Monica, California y Beverly, Massachusetts ante la mala situación económica de la compañía, necesitada de reforzar el valor de unas acciones que llevan tiempo cuesta abajo.
Jim Caparro, CEO de Atari, ha afirmado que se van a producir cambios importantes y agresivos tanto a nivel de títulos futuros como de dirección, todo ello encaminado a depurar cuentas y poner a la compañía en un lugar más seguro desde el cual poder afrontar desafíos venideros.