Al igual que otros títulos de la compañía como Demon's Soul o Dark Souls, Bloodborne es un juego de rol y acción con una ambientación oscura llena de secretos, trampas y horripilantes enemigos a los que abatiremos blandiendo hachas, espadas y cuchillos, o bien, con potentes armas de fuego.
Ayer mismo el director de Bloodborne, Hidetaka Miyazaki, reveló la existencia de la Nueva Partida +, que no es otra cosa que un nivel de dificultad extremo al que supuestamente tendremos acceso una vez terminado el juego y que mantendrá nuestras mejoras, aunque los enemigos serán mucho más difíciles de matar. Según el própio Hidetaka Miyazake: “En From Software estamos teniendo problemas para completar el modo Nueva Partida +”. Vamos, que será el infierno.
También hemos podido saber que el modo cooperativo nos permitirá que dos jugadores entren en nuestra partida para luchar contra los enemigos. Si el anfitrión de la partida muere, cada jugador volverá a su sesión sin recompensa alguna, pero si derrotamos al jefe de área los invitados volverán a sus partidas con una recompensa. También se ha desvelado que contará con un modo PVP que consistirá en que un máximo de dos jugadores invadan la partida de otro usuario, si consiguen acabar con el anfitrión se llevarán una recompensa, por el contrarío si el invadido completa los objetivos o termina con los cazadores será él quién reciba la recompensa.
Desde From Software han confirmado que habrá un parche en el lanzamiento de Bloodborne que dará más estabilidad y optimizará el juego online. Como ya os contamos, Bloodborne tendrá una espectacular edición coleccionista y lanzará un pack que reúne el juego y la consola PlayStation 4.