Dicho esto, lo único que habíamos podido ver hasta ahora del conocido como Hydrogen One era una nota de prensa y una imagen oficial, pero el popular youtuber Marques Brownlee han podido jugar con un par de prototipos, incluyendo una unidad no funcional y una pantalla que por el momento permanece oculta a las cámaras.
Según cuenta Brownlee, el sistema modular del Red Hydrogen One resulta relativamente similar al concepto Moto Mods de Motorola, que permite acoplar distintos accesorios utilizando un anclaje magnético, pero tecnológicamente "dopado" en comparación. El prototipo utilizado para mostrar el funcionamiento de estos módulos es una carcasa inerte, por lo que su verdadero potencial sigue siendo una incógnita. No obstante, el vídeo muestra un módulo con una óptica gigantesca para lo que sería un teléfono móvil convencional, dando fe de la intención de Red de ofrecer un sistema de captura profesional y que al mismo tiempo quepa en el bolsillo.
Este módulo se monta sobre un chasis bastante peculiar, con un agarre anatómico (los costados tienen curvas para permitir que los dedos se ajusten con mayor firmeza), botón de grabación independiente y dos altavoces en posición inferior.
En cuanto a la pantalla, el prototipo de panel mostrado por Red permanece oculto dada la presencia de algunos bugs que aún deben ser pulidos, aunque según Brownlee su misteriosa tecnología proporciona una especie de 3D con una sensación de profundidad impresionante. A simple vista da la impresión de que el término "holográfico" es más una etiqueta comercial que una descripción técnica literal de la tecnología utilizada, que todavía ha de ser descrita adecuadamente por el Red.
La idea general de Red no es competir con firmas como Samsung, Huawei o Sony, sino ofrecer un teléfono de altísimas prestaciones y que podría ser de interés para los profesionales del vídeo y la fotografía, entre los cuales la firma posee una legión de seguidores. Esto es algo que también se verá reflejado en el precio.
El Red Hydrogen One saldrá a la venta a comienzos de 2018 en dos versiones: una de aluminio que costará 1.200 dólares y otra especial de titanio disponible por 1.600 dólares. Estas tarifas no incluyen impuestos ni gastos de envío, aunque las personas que reserven uno recibirán algún tipo de detalle por apoyar el producto.
