Según ha declarado Robbie Bach en el CES de Las Vegas, el título de Bungie, previsto en un principio para abril, sigue sin una fecha definitiva e incluso podría verse retrasado de nuevo hasta finales de año si es necesario.
Bungie cuenta con total libertad en el desarrollo del juego y hasta que no se encuentre lo suficientemente pulido no le van a dar luz verde.
fuente: GameKult