Rune: Ragnarok se presenta como un juego de rol de mundo abierto, ambientado en peligroso universo nórdico donde los jugadores se encontrarán en medio de una épica batalla en la que dioses, bestias y los últimos humanos luchan por sobrevivir. El título promete ofrecer brutales combates cuerpo a cuerpo, característica en la que ya destacaba la primera entrega, que al contrario que la secuela apostó por una jugabilidad bastante lineal.
“Desde su nacimiento, los hijos del norte escuchan cuentos sobre el fin del mundo”, se puede leer en la descripción que acompaña el tráiler. “Una batalla tan grande en la que caen los dioses y los Nueve Mundos son consumidos por el hielo y el fuego. Pero estos cuentos son falsos. Los dioses no han sucumbido. Durante siete años nuestros mundos han sido devorados por la muerte y la destrucción. Ahora, la humanidad debe levantarse y hacer aquello que los dioses no pudieron. El Ragnarok debe terminar”.
Para dar fin al Ragnarok los jugadores contarán con el favor de un dios, habilidades especiales y poderosas armas cuerpo a cuerpo. El mundo abierto de Rune: Ragnarok permitirá asaltar aldeas, luchar contra no muertos o navegar en busca de nuevas tierras. En la primera entrega de Rune los jugadores se ponían en la piel del joven guerrero Ragnar, quien gracias a Odin era devuelvo a la vida para luchar contra Loki, dios que se liberó de sus ataduras para luchar en el Ragnarok.
"Después de 17 años, estamos encantados de poder anunciar un nuevo juego de la saga Rune", dice Chris Rhinehart, director del proyecto. "Siguiendo con el espíritu del original, Rune: Ragnarok presentará un combate intenso y brutal en un mundo impregnado de la mitología nórdica”.
Por el momento Human Head Studios no ha anunciado en qué plataformas o cuándo estará disponible Rune: Ragnarok.
