Para disfrutar de LastPass en varios dispositivos sin tener que pagar basta con acceder a través de un usuario previamente registrado o abrir una cuenta nueva. No es necesario realizar cambio alguno si ya se ha utilizado previamente el servicio.
A pesar de ser ahora una app gratuita, LastPass seguirá ofreciendo una versión Premium (con un precio de un dólar al mes) que brinda características avanzadas como prioridad a la hora de contactar con el servicio técnico, contraseñas compartidas con hasta cinco usuarios adicionales, identificación de dos pasos mediante pendrives YubiKey y hasta 1 GB de almacenamiento cifrado en la nube.
LastPass funciona como si se tratara de una caja fuerte para todas las contraseñas del usuario, con la capacidad añadida de generar claves con un alto grado de seguridad (y virtualmente imposibles de recordar). La aplicación o plugin para el navegador detecta los sitios a los que se quiere acceder y, si así se desea, introduce o recuerda los datos de identificación del usuario de forma automática para que no tenga que recordarlos ni escribirlos de forma continua. La versión móvil también permite acceder a los sitios directamente desde los marcadores de la app.
A pesar de que LastPass almacena todas las contraseñas en la nube, lo hace en una base de datos cifrada y no tiene acceso a la contraseña maestra. Esto hace que sea mucho más difícil que los hackers puedan hacerse con las claves de sus clientes, algo que ya han intentado anteriormente.
