Según Chris Satchell, ingeniero del
Xbox Advanced Technology Group, la nueva consola de Microsoft Xbox 360 será
a prueba de hackers. Ha afirmado que una de las razones por las que eligieron un diseño de hardware personalizado fue la implantación de medidas de seguridad
a nivel del silicio, consiguiendo niveles de protección
nunca antes vistos. Comenta además que con su diseño de seguridad, aunque alguien consiguiera romperlo no funcionaría con otras consolas.
Parece sin embargo que todo el equipo de Microsoft no está tan convencido. Hace tan sólo unos días el director de Estrategia Técnica de Xbox Live, Andre Vrignaud,
respondía así a una pregunta sobre la posibilidad de modchips en Xbox 360 en una presentación londinense:
Nunca digas nunca, matizando a continuación que creía que
pasará un largo tiempo antes de que la consola logre ser modificada. Tiempo al tiempo.