Microsoft presentó Xbox Scarlett en el E3 2019 y desde entonces no hemos tenido nuevos detalles de la consola. Eso significa que por ahora nos tenemos que conformar con pequeñas declaraciones, como las que Aaron Greenberg, responsable de marketing en el equipo Xbox, ha dispensado en el último número de Official Xbox Magazine.
“En la próxima generación, creo que apreciarás una gran actualización en la CPU porque queremos asegurarnos de que no hay ningún compromiso con los fotogramas por segundo”, comenta Greenberg para resaltar que Xbox Scarlett no solo será capaz de ofrecer mejores gráficos. “Sí, podemos tener 4K, pero también 120 fotogramas por segundo. Creo que son capacidades que la gente no ve a día de hoy”.
No queda del todo claro si Xbox Scarlett podrá ofrecer juegos a 4K y 120 FPS o si ambas características deben ir por separado. Inicialmente, parece que será lo segundo. El pasado agosto Phil Spencer, máximo responsable de Xbox, afirmó que la tasa de fotogramas y la jugabilidad serán elementos centrales para Xbox Scarlett. También sentenció que llevar los juegos “hasta los 4K 60 [FPS] será un objetivo para nosotros”. Se desconoce dónde queda el trazado de rayos.
Xbox Scarlett equipará un procesador Ryzen de tercera generación y arquitectura Zen 2. Es la misma unidad que ha elegido Sony para PlayStation 5, así que las diferencias se deberán buscar en las frecuencias de los núcleos y la personalización. En este sentido el trabajo de los ingenieros y la colaboración con AMD será de vital importancia. Siguiendo con el hardware, el resto de características también son muy parecidas entre ambas consolas, incluyendo la gráfica Navi (Radeon RDNA), el uso de lector óptico y un almacenamiento SSD.
También hay igualdad con la fecha de lanzamiento, ya que tanto Xbox Scarlett como PlayStation 5 se pondrán a la venta a finales de 2020. Por ahora la gran diferencia entre ambas consolas es la forma que tienen sus fabricantes a la hora de facilitar datos. Microsoft apenas dice nada después de la presentación en el E3 2019, mientras que Sony ha ofrecido dos oleadas de información en una estrategia que parece tener como objetivo sofocar cualquier eventual filtración.
