Nintendo ha presentado recientemente una demanda contra los administradores de dos páginas web que distribuyen ROMs de sus antiguos videojuegos acusándolos de una “infracción descarada y a gran escala” de su propiedad intelectual, según informa
TorrentFreak. La reacción no se ha hecho esperar y hace unas horas LoveROMS ha
eliminado el software de Nintendo, mientras que
LoveRETRO ha dejado de estar operativa.
“Las páginas web LoveROMS y LoveRETRO se encuentran entre los más conocidos
hubs de juegos piratas”, dice la
demanda presentada por Nintendo ante un tribunal de Distrito en Arizona, Estados Unidos. “A través de ambos portales, los demandados reproducen, distribuyen, comunican públicamente y exhiben una gran cantidad de copias no autorizadas de videojuegos de Nintendo, todo ello sin el permiso de Nintendo. Esto incluye miles de juegos desarrollados para casi todas las consolas de Nintendo”.
El objetivo de Nintendo con la demanda, que también menciona la competencia desleal, es terminar cerrando ambas páginas. Además, la compañía solicita daños estatutarios a razón de 150.000 dólares por cada juego que viole su
copyright y hasta 2.000.000 dólares por cada infracción de marca registrada. TorrentFreak afirma que estaríamos hablando de unos daños teóricos que podrían alcanzar los 100 millones de dólares.
En la demanda Nintendo subraya que ambas páginas constituyen un negocio que infringe los derechos de autor de la compañía y que en ningún caso se trata del trabajo de unos seguidores o
fandom.
“Los acusados han dirigido su negocio de piratería con total indiferencia a los derechos de Nintendo", afirma la compañía en la demanda. "No son jugadores casuales, se trata de grupos con un extenso conocimiento sobre la propiedad intelectual de Nintendo y la industria de los videojuegos. Los acusados saben, o deberían saber, que Nintendo es dueña de los derechos y marcas registradas de miles de videojuegos, material que aparece en sus páginas”.
Nintendo no solo quiere cerrar ambas páginas, sino que también quiere quedarse con los dominios. De momento solo uno de ellas ha cerrado cumpliendo con parte de la petición, pero los hasta 100 millones de dólares en daños pueden terminar siendo una medida de presión definitiva.