La secuela de The Lords of the Fallen no verá la luz. En su lugar el editor CI Games ha decidido empezar de nuevo con un reinicio que si todo va según lo previsto, algo que hasta ahora ha sido difícil con esta propiedad intelectual, estará disponible en 2023 para PlayStation 5, Xbox Series y PC mediante Steam. El desarrollo del título corre a cargo de Hexworks, que de momento ha mostrado el título con un primer tráiler cinemático.
“Tras una época en la tiranía más cruel, el dios maligno Adyr fue por fin derrotado. Pero los dioses no desaparecen para siempre”, dice la sinopsis de The Lords of the Fallen. “En la actualidad, eones más tarde, la resurrección de Adyr está cerca. En el papel de uno de los legendarios Cruzados Negros, viaja por el reino de los vivos y el de los muertos en esta extensa experiencia de RPG con jefes colosales, un sistema de combate rápido y desafiante, emocionantes encuentros con personajes e historia inmersiva. ¿Traerá tu leyenda la luz... o las tinieblas?”.
Para cumplir con la misión de derrocar a Adyr, los jugadores viajarán entre dos mundos paralelos, el de los hombres y el de los muertos. Antes de iniciar la campaña, se deberá personalizar al protagonista eligiendo una de las nueve clases de personaje, cuyo estilo de juego se desarrollará y evolucionará en función de cómo lo configure el jugador cuando mejore sus estadísticas, armas, armadura y hechizos. La campaña se puede completar solo o en un modo cooperativo junto a un amigo. En The Lords of the Fallen también existe la posibilidad de que los héroes de otros reinos invadan la partida.
Respecto al sistema de combate, aún queda mucha tela por cortar. Hexworks promete un “combate táctico fluido y desafiante” y asegura que solo aquellos que lo dominen podrán sobrevivir. “Escoge entre cientos de armas únicas brutales o renuncia al metal para dominar la magia y sus poderosos ataques arcanos”, avanza el desarrollador. Por otro lado, los poderes impíos permitirán atravesar los reinos y esta misma magia negra servirá para alcanzar lugares aparentemente inaccesibles e incluso manipular las almas de los enemigos.
