A pesar de las filtraciones de los últimos días, el Galaxy Z Flip aún no había perdido toda la ropa. Un hecho significativo si se considera que hace menos de una semana aparecieron los renders oficiales de prensa, a alta resolución y acompañados de abundantes características técnicas. Sea como sea, vídeo furtivo ha terminado por mostrar en movimiento al que será el segundo teléfono plegable de Samsung.
El vídeo, republicado en Twitter por Ben Geskin, no da pistas sobre dónde fue rodado, pero sirve para dar una mejor idea de las dimensiones que tendrá el Galaxy Z Flip. También permite observar un detalle que pasaba casi desapercibido en los renders oficiales: una diminuta pantalla al lado de la cámara trasera donde se muestra la hora, la fecha y el estado de la batería.
Este rasgo resulta llamativo si se compara con la del Motorola Razr, que usa una pantalla secundaria táctil de gran tamaño para acceder a varias funciones del teléfono en lugar de proporcionar la información más básica sobre el funcionamiento del terminal. Por otro lado, el uso de una pantalla más pequeña posiblemente tendrá un menor impacto en la duración (o incluso el tamaño) de la batería.
Con un tamaño comparable al de una polvera (Samsung estaría buscando en parte al público femenino, según informaciones procedentes de Corea del Sur), el Galaxy Z Flip tendrá un hardware notable, con una pantalla interna Full HD+ cubierta por una capa de vidrio flexible extraordinariamente fina en lugar del plástico montado por otros teléfonos plegables. También habría un chipset Snapdragon 855+ (o un Exynos equivalente en otras regiones, si Samsung no se desvía de sus tradiciones) junto a 8 GB de RAM, 256 GB de almacenamiento y carga inalámbrica.
Asumiendo que no haya sorpresas, Samsung dará a conocer el Galaxy Z Flip junto a los nuevos Galaxy S20 y la segunda generación del Galaxy Fold en un evento especial que tendrá lugar el 11 de febrero, prácticamente a las puertas del Mobile World Congress. Según la publicación alemana WinFuture, que presume de una gran fiabilidad, su lanzamiento europeo será el 14 de febrero. El PVP del teléfono rondará al parecer los 1.500 euros, lo que lo situarían en el creciente mercado de los teléfonos no ya de gama alta, sino de lujo.
El vídeo, republicado en Twitter por Ben Geskin, no da pistas sobre dónde fue rodado, pero sirve para dar una mejor idea de las dimensiones que tendrá el Galaxy Z Flip. También permite observar un detalle que pasaba casi desapercibido en los renders oficiales: una diminuta pantalla al lado de la cámara trasera donde se muestra la hora, la fecha y el estado de la batería.
Este rasgo resulta llamativo si se compara con la del Motorola Razr, que usa una pantalla secundaria táctil de gran tamaño para acceder a varias funciones del teléfono en lugar de proporcionar la información más básica sobre el funcionamiento del terminal. Por otro lado, el uso de una pantalla más pequeña posiblemente tendrá un menor impacto en la duración (o incluso el tamaño) de la batería.
Con un tamaño comparable al de una polvera (Samsung estaría buscando en parte al público femenino, según informaciones procedentes de Corea del Sur), el Galaxy Z Flip tendrá un hardware notable, con una pantalla interna Full HD+ cubierta por una capa de vidrio flexible extraordinariamente fina en lugar del plástico montado por otros teléfonos plegables. También habría un chipset Snapdragon 855+ (o un Exynos equivalente en otras regiones, si Samsung no se desvía de sus tradiciones) junto a 8 GB de RAM, 256 GB de almacenamiento y carga inalámbrica.
Asumiendo que no haya sorpresas, Samsung dará a conocer el Galaxy Z Flip junto a los nuevos Galaxy S20 y la segunda generación del Galaxy Fold en un evento especial que tendrá lugar el 11 de febrero, prácticamente a las puertas del Mobile World Congress. Según la publicación alemana WinFuture, que presume de una gran fiabilidad, su lanzamiento europeo será el 14 de febrero. El PVP del teléfono rondará al parecer los 1.500 euros, lo que lo situarían en el creciente mercado de los teléfonos no ya de gama alta, sino de lujo.
Sólo falta que con los años se vea que estas pantallas aguantan bien, que las bisagras no rompan, y que los precios de la tecnología bajen hasta ser asequibles.