Los juegos de Sonic siempre se han hecho con prisa, menos el primero (y tal vez CD). Joder, claro que está a medio hacer, es que no es un juego completo, sino una mitad. Hay que concederle, no obstante, que por lo menos es bastante más estable que Sonic 2 en términos de glitches y demás pollas. También que todo el material que falta estuviese disponible en Sonic & Knuckles, aunque hubiera que pagar el precio de un juego completo por lo que es básicamente una expansión. Hidden Palace, de Sonic 2, no tuvo esa suerte, lo cual es una lástima, porque era precioso estéticamente y tenía una de las mejores composiciones del juego.