Uno mira el hilo y con los posts de los madridistas da la sensación que el Barça ha ganado 2-0 a un Slavia de Praga. Cuando hasta ayer mismo se leía por aquí que nos iban a masacrar con la línea tan adelantada y Peña de portero, que el Barça no había jugado con nadie y bla bla.
Ahora resulta que el Bayern es un equipo regular tirando a malo y que si tiene suerte entra entre los primeros 24. El sábado si gana el Barça ya está la tirita puesta, que el Madrid pasa de la liga porque ya han ganado mucho y básicamente se dejan ganar. Ya me gusta esa prepotencia, chulería y desprecio. Porque este Barça de Flick se dedica a trabajar y callar. Que hablen los demás.
Precisamente Raphinha no es casualidad que se haya convertido en el alma de este equipo, porque ha sido su filosofía desde que llegó al Barça. Trabajador como nadie, doliéndole cada derrota como a cualquier aficionado de toda la vida y dedicado a callar y mejorar cada día. Y a mi Raphinha me ha desesperado mil veces porque se precipitaba mucho y decidía mal en muchas ocasiones. Pero claro, es lo que tiene si lo haces jugar a asociarse y recibir el balón al pie. Ahora llega Flick, ve que Raphinha es el hijo perdido de Stoichkov y dice "ostia, si a este tío le decimos que vaya al espacio y le damos balones adelantados puede hacer daño". Al igual que Flick ha visto a Lewandowski y ha dicho "vaya, si este tío lo acercamos al área y le dejamos como referencia para los pases y centros, puede marcar goles".
Si al final parece que Flick sea un mago y precisamente ha simplificado todo. Hace a sus jugadores jugar a lo que saben en lugar de querer reinventar la rueda. Pedri se dedica a moverse con libertad en medio, Olmo a jugar entre líneas y a transicionar rápido. Raphinha a picar el espacio constantemente, Lewandowski a rondar el área, Balde a entrar por el carril cuando esté libre...
El partido ha sido un espectáculo. No redondo, y eso para mí es lo mejor. De hecho desde el primer gol al del Bayern, han sido los peores minutos de la temporada y con bastante diferencia. El Bayern nos ha pegado un baño ese cuarto de hora horrible. Tenían la presión arriba sin desfallecer y con Peña el Barça era incapaz de encontrar al hombre libre para salvar la presión. Las jugadas del Barça eran todo el rato lo mismo: defensa presionado, se la deja a Peña que no encuentra a nadie disponible, termina pegando pelotazo y rezando que la baje Lewan.
Pero es que el Barça todos estos años, por bien o mal que jugase, a la que algo se le ponía en contra en Europa se hundía. Contra el Bayern en 2022 se hizo un PARTIDAZO en el Allianz. De verdad, la gente se ha olvidado pero fue un partidazo donde el Barça fue bastante superior al Bayern, posiblemente de los mejores con Xavi junto al 0-4 en el Bernabéu. Pero se fallaron las ocasiones clarísimas y llegó el Bayern, metió un gol y el equipo se hundió por completo y en dos o tres minutos cayó el segundo, del que ya no se volvieron a levantar. Y esto era una constante.
Por eso digo que hoy la mejor noticia es que no hemos hecho el partido de nuestras vidas. Que durante 15 minutos nos han sometido y hemos dado pena y pese a ello y el rival, el equipo no solo no se ha hundido, sino que ha crecido. Porque a partir de entonces se ha empezado a controlar más el juego, a jugar al ritmo que necesitábamos y a aprovechar las debilidades del Bayern. En la segunda parte ya con De Jong se ha podido adueñar de la pelota y ha bailado a todo un Bayern que ha creado relativamente poco peligro. Y es que Peña apenas ha intervenido en todo el partido (por cierto, posiblemente su peor partido y ya es decir, gracias a la defensa que no le han chutado apenas porque ha tenido un montón de salidas en falso y de nuevo muy miedoso y dubitativo, que Szczesny se ponga en forma ya, por favor) y eso cuando nos auguraban que nos iban a meter 10 con la defensa adelantada.
Todo ello jugando con un juvenil de central, un jugador que ni va con la selección como es Íñigo, un chaval de la cantera que apenas lleva un par de meses jugando fuera de 1a RFEF teniendo que sostener el medio campo contra todo un Bayern, otro crío delante que se sacó la ESO hace 4 meses... Es una locura, es que te dicen hace unos meses que le metes un 4-1 al Bayern con Peña, Cubarsí, Íñigo y Casadó en el 11 y simplemente lo mandas a pastar.
Qué ganas de Clásico. Por primera vez en tiempo no estoy nervioso por el partido sino ilusionado. Porque podemos perder perfectamente, jugamos con un altísimo riesgo y el Madrid es el equipo con más pólvora del mundo que como les demos medio metro nos meten 4. Pero ya he visto que otra cosa no, pero competir y jugar hasta el último minuto como si fuese el único partido que existe, se va a hacer. Ya solo queda que la pelotita quiera entrar como ha querido hoy.