Tenía ganas de verla, no tanto por sus virtudes como película como por el morbo de si realmente era para tanto a la vista de los problemas que ha tenido para ser estrenada, con todos los abogados de Trump volcados en sacarla de circulación. Al final ha visto al luz de la mano de la distribución independiente y la taquilla ha sido escasa, porque al fin y al cabo sirve al fin que sirve, a semanas de las elecciones, y no se oculta en sus intenciones.
Lo cierto es que al margen de sus carencias no está exenta de interés, y de hecho la estética de la película, en 4:3 y con aspecto de documental o grabación de la época ( se ciñe al periodo finales de los 70's mediados de los 80's ) está realmente conseguida. Los protagonistas están francamente bien, con un Sebastian Stan que no podía evitar recordarme a un joven Robert Wagner y un Jeremy Strong excepcional que compone un Roy Cohn siniestro y detestable, y su primera parte, donde se muestra como Roy ( abogado y mano derecha de McCarthy durante la Caza de Brujas y capitán de navío en las aguas fétidas de la política estadounidense ) toma a Trump como protegido y le introduce en las malas artes del poder, funciona bastante bien, pero a partir de ahí la sal gruesa empieza a adueñarse del relato y todo queda mucho más diluido de lo que un retrato tan vitriólico del payaso anaranjado podría ofrecer. Entre la escena de la violación y la de a fiesta de Cohn, consumido por la enfermedad al final, lo menos que puede decirse es que resulta todo pasado de vueltas y, aún así, más miedo da un noticiario donde se le oiga lo que dice en sus discursos.
Yo la he encontrado pese a todo interesante, pero como con Reagan, que comenté hace poco, creo que es solo para determinada audiencia que sepa lo que va a ver.
EDIT.- Ah, sí, importante: el título. Se llama The Apprentice ( El Aprendiz ) porque da lugar a un doble sentido, por una lado muestra a Trump como una marioneta creada a imagen y semejanza de Cohn, su aprendiz de brujo, y por otra parte el programa televisivo de telebasura que llevó a Trump a la fama. The Apprentice, donde ejercía de maestro de ceremonias despidiendo a los participantes que fracasaban con aquel célebre "Fired !!! " ( ¡ Despedido !!! ) La semana pasada precisamente el responsable de ABC del programa lo puso a caldo, dejando claro que se arrepentía de haber dado a luz a este monstruo ( "fue el único empresario que se mostró dispuesto a hacerlo, el resto estaban ocupados trabajando" ). The Apprentice fue posteriormente presentado por Arnold Schwarzenegger, cuya rivalidad con Trump nació ahí. Pero el famoso actor y exgobernador de California, un tipo inteligente, que esta semana ha declarado que aún siendo republicano votará por Harris, es un tipo mucho más inteligente y no baja al barro.
Una última reflexión. Quien tenga memoria y siga un poco la política norteamericana recordará inmediatamente al otro responsable de que Trump haya ocupado y pueda volver a ocupar la Casa Blanca. Y es es ni más ni menos que... Barak Obama. ¿ Quién le mandaría reírse de Trump durante aquella cena de infausto recuerdo con los corresponsales de prensa de la Casa Blanca, cuando hizo escarnio a su costa con él presente, diciendo que si un día llegaba a la Casa Blanca la pintaría de rosa... ?. Pues se presentó y llegó. Y no la pintó de rosa, la pintó de negro. Un negro funesto que invadió el mundo entero y amenaza con volver.