Sin estar a disgusto con el dibujo del nuevo manga, me hubiera gustado una representación algo distinta del mundo de Dragon Ball con un dibujo que no fuera una copia de el de Toriyama, como han hecho con Saint Seiya, Blood, o como viene siendo habitual en el cómic americano...o incluso con el manga de Blue Dragon ,cuyo anime sí que cuenta con los diseños de Toriyama.
Al fin y al cabo, por mucho que se acerque al original, una copia seguirá siendo una copia. En cambio, un cambio (valga la redundancia) estético puede otrorgar (si se hace bien) una mayor riqueza a todo ese mundillo, además de cierta frescura.