A mi siempre me ha encantado la historia de Laplace y Napoleón. Voy a resumir rápido y mal lo que recuerdo, pero es interesante que los busquéis por ahí porque merece la pena leerlo bien. Para que os pongáis en perspectiva, estos dos eran colegas, y cuando Laplace presentó su "Tratado de la mecánica celeste", Napoleón le preguntó que cómo era que no había nombrado a Dios en todo el libro (en muchos casos, a Dios se le solía nombrar para justificar los problemas a los que no encontraban explicación lógica todavía), a lo que Laplace respondió: "Señor, no he necesitado esa hipótesis".
Es una de las frases que más me ha gustado desde que conocí esta historia, que os vuelvo a recomendar que la busquéis porque es muy recomendable.