Francamente, te mereces que te sodomice una y otra vez. Porque te parecerá bonito convertirme en la cosa ñoña que soy ahora. Aunque a tu lado, sigo siendo un hombre completamente viril, lo cual no sé hasta qué punto es un consuelo.
En cualquier caso, me siento inmensamente feliz. No he mantenido ninguna de mis promesas/propósitos. Ni mantenerme alejada de los informáticos, ni pasar de enamoramientos... el destino me ha servido en bandeja a un informático de lo más raro y nenaza. Y lo peor es que me encanta. Estos días de vacaciones han sido un auténtico viaje al paraíso, un reencuentro con la felicidad que ya creía perdida. ¿Cómo se puede disfrutar tanto simplemente estando entre los brazos de otra persona? ¿Cómo se me puede quedar esa cara de boba cada vez que sorprendo su mirada clavándose en mí? Y lo que me encanta despertar y verlo dormido a mi lado, como un niño bueno, de esos que no piensan en cosas raras y malvadas como crear bots. Es taaaan achuchableeee.
Ains, eres un merluzo. Pero te quiero. Adoro cuando vienes de trabajar y entras en la habitación, despertándome con un beso. Cuando dices alguna de tus tonterías solamente para verme reír. Cuando me comporto como la niña que soy, y lejos de asustarte, te unes a mis juegos. Cuando nuestros cuerpos se buscan entre las sábanas. Cuando recobro las respiración mientras me estrechas contra tu pecho. Cuando tus ojos son un reflejo de los míos y nos amamos sin palabras.
Admiro todo lo que te he hecho pasar y tu entereza para lidiar con mi situación. Cuando pierdo el control y vuelven mis demonios, tú estás ahí para acallarlos, siempre. Cuando las ganas de seguir adelante me abandonaban, tú estabas ahí para tirar de mí. Y sigues estándolo.
Me has devuelto la ilusión en un futuro. No me importa que muchos no lo entiendan, que muchos hablen sin saber. Solamente sé que me haces muy feliz y que te quiero muchísimo.
Y antes de que el hilo colapse por exceso de edulcorante, me vuelvo a la cama. A esperar tu regreso ^^
Te quiero