Con las dos consolas en mi casa (sin profundizar demasiado en los juegos) comento mi experiencia:
- Diseño: Series X es elegante, discreto, el silencio y oscuridad absolutas. Me parece increíble que hayan metido tanto en tan poco espacio.
PS5 es más llamativo, diría que juvenil, de pie gana enteros aunque al ser tan grande no a todo el mundo le quedará bien (incluyéndome a mi). Las luces me parecen innecesarias, especialmente en modo reposo (tal vez se puedan desactivar). También es silenciosa aunque tras ponerlo en reposo al principio me sacaba algo de ruido.
- Primera experiencia: Si vienes de la One series X es continuista en general, cambia algún botón del mando, la cruceta y los tiempos de carga (lo cual no es baladí) pero la sensación es de estar en un mismo entorno con la misma interfaz. No emociona demasiado. Si le añadimos la falta de un título estrella de lanzamiento la cosa se pone peor. En cualquier caso, jugar a Horizon 4 sin apenas tiempos de carga y a 60hz es una maravilla que por si solo compensa la consola (no lo digo en broma). Actualmente estoy jugando a Watch Dogs legion en esta consola y luce genial.
Con PS5 he sonreído, la interfaz es distinta (me gusta que la PS Store esté integrada). Sony ha tardado 5 generaciones de consolas (de sobremesa) en acertar con un mando, dual sense me ha parecido fantástico (tampoco era difícil mejorar los dual shock). El "regalo" de Astro´s Playroom además permite conocer más a fondo el mando (muy al estilo Nintendo), y es un detalle, porque tiene mucha calidad. Con él queda claro la capacidad del mando de ofrecer sutiles vibraciones o la de endurecer los gatillos y francamente, la experiencia es satisfactoria. Se trata, además, de un guiño absoluto a los fans de la marca PlayStation, las referencias y objetos coleccionables de consolas antiguas son constantes.
- Conclusión inicial: Ambas son grandes consolas, con mucha potencia y sobre todo rapidez de carga. Y eso es mucho decir, porque mejora la experiencia de usuario radicalmente respecto a generaciones pasadas.
La principal pega de Xbox es la ausencia de un título que emocione y el diseño continuista de la interfaz (y del mando, aunque el anterior ya fuese muy bueno) hace que la sensación de salto no sea tan evidente, aunque luego al jugar a los juegos se pueda constatar que si. Game pass sigue siendo la carta bajo la manga para esta consola, al precio que tiene y los juegazos que ofrece (y ofrecerá) no tiene rival.
PS5 apuesta por un sistema más clásico en cuanto a la venta de juegos, la inclusión de PS PLUS collection (20 juegos estrella de PS4 incluidos en ps plus) es atractiva (y claramente una respuesta de Sony al Game pass de Microsoft) que logran mitigar el escaso catálogo inicial como nueva generación.
Independientemente de quien gane la generación espero que ambas vendan bien, ya que la competencia permite que las compañías se esfuercen más en contentar a los usuarios. Personalmente me encuentro emocionado con esta nueva generación porque va a aunar una gran potencia y una inmediatez de cargas inéditas desde los comienzos de los 90.