Pero esto qué es. Cuando yo me levanto se me hunde la gente. No, no y no.
Estaremos solteros (lo que os recuerdo, significa que podemos acabar con cualquier persona maravillosa), pero es que además...
-No estamos postrados en una cama sin poder movernos. A ver cómo juegas a la play así.
-No mutamos en cucarachas de forma aleatoria (en la antigua Grecia pasaba mucho, terrible).
-Tenemos gente que nos quiere. No en plan pareja, sino gente a la que importamos. Todos tenéis alguien que os quiere. Yo misma os quiero a un montón de vosotros.
-Nadie os ha intentado matar. Lo cual es bueno.
-Tenemos un techo, lo cual está muy bien para cuando llueve. Y tenemos comida, que está bien para no morirnos y para que el estómago no se ponga a conversar en idiomas mordorianos.
-Tenemos la capacidad de hablar, de leer, de escribir, de desplazarnos, de ondular de pedir mil euros. Lo que implica que somos seres humanos bastante completos.
-No se os aparece Rajoy en tanga dentro de vuestra cama. A un amigo le pasó y desde entonces no es el mismo.
-No sé dónde vivís (o me he olvidado del lugar, como en el caso de Resil). Así que mis amenazas no pueden ser cumplidas.
-No os ha violado un rinoceronte.
-No os han sacado los ojos con cucharillas de café. Con otras cosas no impacta tanto, pero con cucharillas de café... malas experiencias pasadas, os lo aseguro.
-Y buah, muchas cosas más. Tengo demasiado sueño para pensar. Pero no es momento de hundirse, no.
Voy a poner algo para subir el ánimo:
Y ahora a dormir, que me han entretenido con charla de lo más amena, pero luego me va a pasar factura.