Hoy día caballeros estaré honrado de dirigirlos, y más honrado de llevarlos al campo de batalla; pero hay otro honor que se les ha dado, ese honor, es la respuesta a esta pregunta: “Quién soy yo?”
Yo soy un campeón.
Necesito que lo recuerden durante todo el partido. Yo conquistaré lo que nunca ha sido conquistado, la derrota no estará en mi credo, haré creer a los que antes han dudado de mí. Siempre procuraré mantener el prestigio, el honor y el respeto de mi equipo. Entrené mi mente y mi cuerpo con constancia.
Soy consciente del hecho de que mi oponente no espera que yo gane, pero nunca me rendiré. La debilidad no estará en mi corazón, miraré a mis compañeros que me han acompañado hasta tan lejos y a aquellos que me han entrenado y les mostraré toda mi fortaleza.
Estaré encantado de ir al campo de batalla y me moveré hacia adelante, con todo lo que tenga, y alcanzaré mi propósito por cualquier medio a mi disposición; y cuando llegue allí, lo haré violentamente, arrancaré el corazón de mi enemigo y lo dejaré latiendo en el campo; porque él no puede detenerme.
A mi lado están mis compañeros, compañeros que estarán conmigo hasta la muerte a través del sacrificio, a través de la sangre, a través del sudor, a través de las lágrimas; nunca los dejaré caer, nunca los decepcionaré y nunca dejaré a un enemigo a mis espaldas, porque mi oponente no conoce lo que hay en mi corazón.
Nadie podrá negarme, nadie podrá definirme y nadie me dirá quién o qué soy, o puedo ser; creer en mí cambiará mi mundo, ha movido países, ha movido continentes, ha puesto a un hombre en la luna y me llevará a ganar esta batalla.
Derrota y rendirse, eso no está en mi vocabulario, yo no entiendo su significado, yo no conozco lo que es que las cosas vayan mal, yo no conozco los errores; pero sí conozco esto, sí conozco la victoria y entiendo lo que es el nunca rendirse. No importa cómo vayan las cosas, mi corazón y mi mente cargarán mis cuerpo cuando mis piernas ya no puedan más.
Hoy es “El día”. No mañana, ni la semana siguiente, sino ahora, aquí mismo, en mi casa, en mi hogar. La historia me recordará, no dejaré que me impongan el ser gentil, yo me defino a mí mismo, yo escribiré mi propia historia y nadie me dirá lo que no puedo ser. Nunca dejaré el campo sin saber que dejé todo lo que podía dar. Porque qué soy yo???
YO SOY UN CAMPEÓN!