Para mí gusto, la culpa la tiene Manzano. Jugamos contra un equipo inferior con sus suplentes y en vez de adelantar la defensa y salir a presionar, mete a la defensa en el area y a esperarlos en nuestro campo. Y lo de no ser capaces de tirar un desmarque por detrás de su defensa adelantada casi hasta el centro del campo, no tiene nombre.
Me parece a mí que desde el 5-0 Manzano se ha acojonao.
Y por Dios, que le den a Perea la carta de libertad ya y que se vaya a tomar por culo.
EDITO porque no me deja poner algo nuevo:
En el partido de ayer contra el Sevilla estuvimos bastante bien casi todo el partido (quitando el rato que nos achucho el sevilla al principio de la segunda parte). El problema es que seguimos sin meterlo un gol al arcoiris. Si Falcao no acierta nos comemos los mocos.
Unos apuntes:
- Falcao al área. Nada de salir de ella a participar del juego. Tu a rematar y punto que es lo que sabes hacer.
- Mario, a lo suyo, a destruir y a dársela al que esté más cerca. Si empieza a intentar crear juego, la pierde el 99% de las veces. A lo mejor sería mejor que jugar a Assunçao para hacer solo eso, pero yo no decido.
- Reyes bien, para mí el mejor partido del utrerano en lo que va de temporada, sobre todo en la segunda parte.
- Godín, lento, lento, lento y más lento. No está bien físicamente, no debería jugar. Pero como he dicho antes yo no decido.
- Manzano: bien y mal. Bien, porque cuando más nos achuchaba el Sevilla, quitó a Tiago y metió a Gabi y les bajamos los humos y volvimos a tener el control del partido. Mal porque quitó a Reyes cuando mejor estaba, llegando, tirando, asistiendo y creando juego. Arda y Diego estaban fundidos pero quitó a Reyes. Que alguien me explique por qué. Además, volvió a demostrar que está acojonado desde el 5-0. En otras partidos, cuando ibamos ganando era capaz de dejar un solo centrocampista (contra el celtic, el racing o el sporting), y cinco atacantes (Diego, Reyes, Falcao, Arda y Adrián). Ayer no se atrevió a quitar a Mario en vez de a Reyes y haber metido a Salvio o a Adrián. Está claro que nos habríamos vendido atrás, pero otras veces lo hizo y no pasó nada. Ayer prefirió empatar que ganar.