Lo primero, el Sevilla es un equipo que no juega en Europa. Tuvo su momento de gloria y ahora a ver si aguanta entre los 5 primeros. Mediocridad ofensiva y un buen sistema defensivo que funciona dejándote la vida para intentar hacerle cosquillas al campeón pero que te hace encajar dos goles ante el Racing, que dicho sea de paso, apesta a 2ª y llevamos 8 jornadas.
Lo segundo. El Barcelona está físicamente hundido. Y mientras no se recupere el tono físico (Messi, Alves, Pedro, Villa) no habrá goleadas ni grandes partidos. Señores, llevamos 3 años jugando igual, hemos ganado todo varias veces, ahora toca ser humildes, que es el momento más difícil. Nos hemos acostumbrado a las manitas, a los goles de Playstation, a sobarle al máximo rival y hundirles en la miseria una y otra vez... y esto no es así siempre. Para aguantar hay que renovarse y ser humildes. Hoy el Granada casi nos da un susto enorme, y estoy seguro de que el finde tocará dejarse la vida en casa frente al Mallorca. La motivación es baja, además. Es un equipo que tiene pocos retos, uno de ellos es el Mundial de Clubes que hay que volver a ganar para decirle a Neymar lo que se va a encontrar aquí. Otro es anular el 2º año de Mourinho. Y ahora eso está lejos, los equipos saben hacer daño, están físicamente fuertes y hay que sufrir. Es lo que toca, hay que sumar victorias (aunque sean 0-1, de falta directa y con Messi espeso) para no descolgarse del equipo que pita que es el Real de Madrid. Y punto.
Nada de derrotismos absurdos, creo que eso lo tenemos más que superado. Estamos viendo la historia viviente de nuestro equipo y hay que serle fiel. Como bien apuntan por aquí, el Barça arranca siempre mal, es el equipo de Europa que más partidos juega y me juego el cuello a que es el que más internacionales manda en cada convocatoria. Es el precio del éxito, y creo que todos estamos dispuestos a pagarlo.