bueno es un ladrillo pero para los beticos .. es una lectura interesante...
...
nteresante artículo de Niles Crane en el foro de Betisweb:
Lo siento, me es difícil resumirlo más sin que se escapen datos; para leerlo hay que tener ganas y paciencia, pero es explicativo de la situación económica de la sociedad y el porqué de las reticencias, de pese al enfado y la desgana de Lopera, éste no venda las acciones y deje el Betis: Se descubriría el pastel.
Gracias por la paciencia.
La Inspección de Hacienda estimaba que el entramado empresarial urdido por el presidente del Real Betis Balompié, Manuel Ruiz de Lopera, implica un “vaciamiento patrimonial del club”. Ésta fue una de las conclusiones de la inspección que tuvo lugar el año 2.000 en el club sevillano; según Hacienda, los contratos que Lopera hizo firmar al Betis a favor de varias sociedades controladas por él arrojaron un saldo de 1.744 millones de pesetas a favor del empresario solo en el periodo entre 1.993 y 1.997.
De acuerdo con la información reunida por la Inspección de la Agencia Tributaria en la inspección del club realizada durante el citado año, la aplastante mayoría de los ingresos del Betis ,taquillas, derechos de imagen televisivos, marca de las vestimentas, patrocinadores, excepto las quinielas y las subvenciones, han sido cedidas a un rosario de sociedades del presidente Lopera encabezadas por Técnicas y Garantía del Deporte, S.A. (TEGASA).
La inspección de Hacienda se centró en las consecuencias para el club, y para el fisco claro, de dos contratos firmados entre el Betis y la sociedad TEGASA en 1.993 y 1.996. En concreto los acuerdos establecían que el Betis cedía a TEGASA el arriendo y cesión de todas sus instalaciones, servicios e ingresos a cambio e una determinada cantidad de dinero. En la temporada 93/94 este pago se fijó en 899 millones de pesetas. Según aseguran las cuentas, TEGASA perdió dinero en esta temporada al ingresar solo 761 millones, una pérdida de 138 millones de pesetas. Igualmente en la temporada 94/95 el pago llegó a los 1.494 millones de pesetas con unas pérdidas para TEGASA de 135 millones.
El siguiente ejercicio, sin embargo, los ingresos de la actividad deportiva superaron ya los 1.900 millones de pesetas mientras que TEGASA solo pagó al Betis 1.307 millones, el saldo favorable para TEGASA de 607 millones de pesetas. El gran salto se produce en el ejercicio siguiente, temporada 96/97, los ingresos se disparan espectacularmente, gracias a los incrementos de los derechos de televisión recibidos por todos los equipos de primera división. Los ingresos de la actividad deportiva ascienden a 3.980 millones de pesetas, mientras que los pagos del grupo de empresas de TEGASA al Betis es de 2.575 millones, es decir, 1.410 millones de pesetas menos. Un simple ejercicio de sumas y restas nos da un margen para TEGASA de 1.744 millones de pesetas.
Asimismo, algunos de los contratos de suministro y patrocinio firmados por el Betis y cedidos a TEGASA, están condicionados a la presencia de Ruiz de Lopera al frente del club verdiblanco. Este es el caso de un contrato firmado en 1.996 con la firma deportiva Sport Kappa en el que se considera la marcha de Lopera como motivo suficiente para rescindir el contrato sin tener que pagar indemnización. TEGASA además percibe los ingresos de otros patrocinadores comerciales.
También la gestión de los ingresos de la taquilla y los abonos de temporada se lleva fuera del Betis. Concretamente a favor de la empresa JOMAJEN, en la que están integrados los viejos empleados de las taquillas del club. En este caso la inspección, según la documentación consultada, no pudo establecer qué hacía esta sociedad con los importantes ingresos recibidos ni si éstos generaban algún rendimiento financiero.
Según la Inspección de Hacienda, los contratos firmados entre la sociedad TEGASA y el Real Betis Balompié no estarían justificados como un verdadero pacto de prestación de servicios. En primer lugar, porque quien presta los servicios, es decir, la actividad deportiva, que generan los ingresos es el club y no ninguna de las sociedades instrumentales de Lopera. También porque TEGASA es una sociedad sin estructura ni capacidad alguna para gestionar los servicios supuestamente arrendados al club. TEGASA tiene un capital social de 180.000 euros y una empleada; creada en 1.971 por Lopera como Técnicas Ganaderas S.A. y que cuando Lopera adquiere las acciones del Betis la g de ganadera pasa a ser entonces una g de garantías del deporte.
Las normas reguladoras de las sociedades deportivas anónimas establecen los criterios para la recepción de ayudas y subvenciones públicas a los clubes de fútbol. Para poder tener acceso a ellas, las entidades deben tener controlada la gestión y sus operaciones financieras, algo que no ocurriría en el Betis, pues el control de la gestión no está en manos del club sino de las sociedades de Lopera.
Aunque TEGASA no es accionista directa del Betis, según los datos recabados por Hacienda, sí lo es otra sociedad de Lopera, FARUSA, que posee el 52 % del capital del Real Betis Balompié SAD y, también, el 25 % de las acciones de TEGASA. Esta última sociedad amplia su capital a 180.000 euros en 1.994 gracias a la aportación de dinero hecho por otra sociedad del grupo de Lopera, FRIGIMUEBLE. Otras sociedades de su área de influencia y vinculadas al Betis son Inmobiliaria Centro Colón Sevillano (INCECOSA), Familia Ruiz Avalos (FARUSA) y Ruiz Lopera S.A. (RUOLSA).
Desde la actuación de Hacienda y la denuncia de ésta ante el Juzgado, Lopera cambia y la nueva sociedad que presta los mismos servicios que TEGASA se llama ENCADESA, de la misma cuerda que la anterior. Los ingresos que ha procurado esta sociedad al Betis en los últimos años han sido: Temporada 2.000/2.001 fueron de 2.130 millones de pesetas (el equipo estaba en Segunda), 2001-2002 pagó 4.630 millones de pesetas, en la 2002.-2003 pagó 4.300 millones de pesetas, pero en cambio llega la última temporada con las cuentas presentadas, 2003-2004 y ENCADESA paga solo 2.400 millones de pesetas al Betis, 1.900 millones menos que la temporada anterior y más de 2.200 millones menos que hace dos. El penúltimo ejercicio económico el Betis perdió en su gestión normal 1.500 millones de pesetas ocultados tras unos beneficios extraordinarios de 2.000 millones procedentes de los ingresos por la opción de compra otorgada a ACS, constructora de Florentino Pérez, por los derechos urbanísticos de la zona delante de Preferencia, venta que se aprobó en la misma Asamblea donde se aprobaron también esas cuentas que ya reflejaban esa operación (ingeniería creativa aplicada a la contabilidad), actuación urbanística pendiente de la aprobación del PGOU de Sevilla.
En el ejercicio 2.004-2.005 las cuentas del Real Betis Balompié SAD presentaron un déficit en las mismas de cerca de 900 millones de pesetas, y pese a entrar en Champions para la temporada 2.005-2.006 anunció para ésta un presupuesto inferior al de la temporada anterior en el que no participaba en competición continental alguna, no contemplando tampoco el aumento de ingresos por derechos de televisión y el aumento de los precios de abonos. Si en el ejercicio 2.005-2-006 se ha repetido el déficit, la Ley de Sociedades Anónimas Deportivas obligaría a una ampliación del capital de la SAD.
Hacienda acabó llevando al Juzgado a Lopera por delito fiscal; de los presuntos delitos societarios detectados por la Inspección corresponderían las actuaciones a los accionistas minoritarios, si estimasen oportunas tomarlas.
...