Ayer estuve dándole unas cuantas horas a mi nueva adquisición loca; una 3DS japonesa y los Heroes Ultimate Mission. Es sorprendente como hay tan poca información en cualquier idioma románico sobre estos juegos
Está claro que al no salir de Japón y tener un nicho tan reducido de seguidores en occidente el juego es casi un perfecto desconocido.
Simplificando al máximo, podría decirse que la mecánica del juego consiste en mover cartas por la superficie táctil y hacer de vez en cuando QTE's para ver como se desarrolla el combate, aunque claro, así estaríamos quitándole el 90% de la gracia al juego. El sistema es sencillo; eliges tus personajes (cada uno una carta, el avatar es especial y sube de nivel), los colocas en el campo de batalla cada turno en función de si quieres que acumulen energía o ataquen según diferentes intensidades y haces el minijuego del Budokai 3 de llenar la barra para hacer el máximo daño o la máxima defensa. En función del tipo de personaje (carta más bien) a la hora de atacar se agrupan o realizan diferentes acciones conjuntas que son muy espectaculares la verdad.
¿Y dónde está la gracia, entonces? Visto así el juego parece que carece de todo atractivo, pero es curioso como después de un par de partidas, estás totalmente enganchado. A esto ayuda lo primero la enorme cantidad de misiones que hay, tanto del modo historia como del arcade, y lo segundo el ENORME encanto del "a ver que personaje me dan ahora". Buscar cualquier verosimilitud con la historia de Dragon Ball es bastante complicado, puesto que debes cuadrar personajes en tu equipo con el enemigo contra el que estés peleando, y a no ser que tengas muchas cartas, lo más probable es que tengas una mezcla de personajes de películas, Z, GT e inventados que no pegarán ni con cola. Pero como lógicamente no lo enfocas de esa manera, el juego es muy pero que muy divertido.
No sé con el paso del tiempo si irá gustándome más o le pillaré manía, su mecánica de juego es sin duda muy especial, pero mi primera impresión es muy positiva. Destacar que había leído que era complicado de jugar sin saber japonés y en absoluto, las cartas tienen las características muy visuales, los menús son muy sencillos e intuitivos de entender y los modos de juego funcionan todos con iconos.
Un saludo.