Acabo de ver el anuncio y es patético.
Victimismo a tope, un chaval humilde que va en su autobús a jugar con su equipo a una ciudad donde no se les quiere, lo de "puta Barsa, puta Cataluña", me ha matado.
Ponen a los aficionados del Madrid como energúmenos de extrema derecha, mientras el pobre hombre se evade con su música.
Como diría el señor Busquets, "mucho morro"... Oh wait.