Creo que lo más decisivo en esta final no ha sido Kobe ni Pau sino el factor cancha, si este partido lo juegan los Lakers en Boston, palman fijo, les ha beneficiado muchísimo. Sin ser un gran aficionado al basket, soy de los Celtics de toda la vida desde los épicos duelos de los 80, cuando el baloncesto casi llegó a competir con el fúrbol, pero he ido con los Lakers a muerte por Pau, sí, me da igual lo que digan.