SEGA sabe que son muchos los seguidores fieles a su mascota, el erizo más rápido del mundo, Sonic y por esa razón, en su 20 aniversario, que no es poco, han decidido sacar un nuevo título del azulado protagonista en el que recorreremos a toda velocidad fases extraídas de sus más míticas aventuras.
Una flecha directa al corazón de la nostalgia, en una trayectoria, que a pesar de sus altibajos en ciertas épocas, es indudable que ha marcado un punto de inflexión en la historia de los videojuegos.
Sonic Generations, cómo se títulará esta joyita que estará disponible el 4 de Noviembre para PS3, 360, PC y 3DS, nos plantea la posibilidad de jugar con las dos variantes principales del diseño de Sonic, el regordete y bajito, que protagonizó los míticos juegos clásicos de 8 y 16 bits y el más estilizado de ojos verdes, que podríamos definir cómo moderno, desde Sonic Adventure hasta la actualidad, sin ser del todo cierto, pues ha sufrido pequeñas modificaciones desde entonces, que pasaremos por alto en este artículo.
La versión que nos acontece, la que disfrutaremos en nuestra portátil de Nintendo en 3D sin gafas, es completamente diferente a las otras tres, las cuáles son en esencia el mismo juego. Para 3DS encontramos algunos niveles distintos o exclusivos, si así preferís llamarlos, y un modo de juego que difiere completamente con la versión HD.
Mientras que para el resto de consolas podremos controlar a Sonic Moderno en entornos 3D, en esta versión deberemos asumir que todas las fases, incluidas las que originalmente se mostraban de este modo, pasan a ser completamente en scroll lateral, creando un modo de juego similar al 2D.
De hecho, a pesar de que este sea el modo de juego que se profundice en esta versión, habrá diferencias en cuanto al control de Sonic Clásico y Sonic Moderno. El estilo del clásico será exactamente igual que si jugáramos aún con nuestra vieja Megadrive, con un tipo de juego veloz, pero quizá más plataformero.
Además, con un control que brilla por su simpleza, con los botones A ó B de nuestra 3DS saltaremos, mediante el stick o la cruceta nos desplazaremos y pulsando abajo y a cualquiera de los botones de salto, realizaremos el mítico movimiento Spin Dash, que tanto echamos de menos en las últimas aventuras de Sonic y que básicamente, nos permite hacernos bola y salir disparados cogiendo buena velocidad.
Sonic Moderno, tiene más movimientos y un estilo de juego que recuerda al usado en las aventuras Rush para Nintendo DS, en el que su principal virtud, es poder alcanzar una endiablada velocidad.
Al igual que con el clásico, avanzaremos mediante el stick o la cruceta, con el A ó B saltaremos y si se activa una señal de objetivo sobre un ítem o enemigo, podremos hacer el movimiento Homing Attack que permite hacer a Sonic una embestida en el aire dirigida y dar un acelerón. Al Y tendremos disponible el Boost, que nos da, siempre que tengamos anillos suficientes, un gran acelerón para coger velocidad y nos proporciona la habilidad de derribar enemigos en carrera. Además, simplemente pulsando hacia abajo en carrera, haremos un barrido que nos permitirá pasar por zonas de techo bajo.
Unos controles simples, en ambas versiones de nuestro erizo, pero bien diferenciadas en cuanto a modo de juego se refiere. Un deleite para los fans más veteranos y noveles.
Los niveles que pudimos probar fueron dos: Mushroom Hill de Sonic and Knuckles y la mítica Green Hills de Sonic, the Hedgehog. Es increíble lo bien llevados que están estos niveles inspirados en los originales. Si bien es cierto que en estas dos fases en concreto con Sonic Clásico tendremos partes semejantes al original, hay diferencias cómo rutas nuevas, que aportan frescura a unos niveles que de otro modo estarían muy trillados para los jugadores acérrimos del erizo.
En cambio, la novedad total llega con Sonic Moderno, con recorridos más originales, llenos de elementos que aparecieron en la franquicia hace relativamente menos tiempo, cómo puede ser los raíles y que ajustan el nivel a la jugabilidad más alocada de este personaje.
Los gráficos son muy correctos y destaca por encima de todo el efecto 3D que lucirá el juego, habiendo incluso cámaras, sobre todo con el Sonic más moderno, estratégicamente situadas para que ciertos elementos del recorrido, nos dé más profundidad con el 3D activado.
Remarcar eso sí, que en algunas zonas, los muros o plataformas desaparecían a nuestros píes, si intentábamos ir hacia atrás, un defecto que esperemos se corrija en la versión final del juego, teniendo en cuenta que nosotros probamos un beta durante el pasado Gamefest.
Sonic Generations es toda una sorpresa que merece ser jugada, incluso en esta versión para portátil, que a priori se podría pensar que podría ser de dudosa calidad. Nada más lejos de la realidad, estamos ante un juego muy digno y a la altura de lo que se espera de él en un 20 aniversario y que sobretodo, los que prefieran los juegos de jugabilidad 2D del erizo, valorarán por encima de la versión para sobremesa.