Cuando salió el Horizon Zero Dawn, mi pedido se retrasó 3 días porque el repartidor que me lo iba a traer tuvo un amago de infarto en medio de la autovía. El chico estaba en el hospital y mi juego en su furgoneta, a la que nadie tenía acceso más que él hasta dos días después. Cuando me llegó 3 días después, me lo entregó una compañera suya y me contó la historia. Lo peor es que una semana después, pedí otra cosa y me lo entregó el mismo chico. Me dijo que ya estaba mejor pero que en ese trabajo no podía faltar mucho. Me dio una pena horrible, menudo estrés de trabajo. Tendría poco más de 30 años.
Esto lo cuento, para que cuando alguno tengáis algún problemas el 19 no os volváis locos asumiendo que Amazon o los repartidores son unos zoquetes. Son humanos, puede haber errores humanos y pueden ocurrir percances inevitables. Desde nuestras pantallas Amazon y su algoritmo mágico parece que es todo automático, pero los que hacen que todo funcione son personas.
Saludos!