Qué pereza de meta. Llevo unos cuantos meses seguidos con doble 11 estrellas en estándar y Wild (y a las malas 11 estrellas en estándar y 10 en Wild en los últimos 7-8 meses) y soy incapaz de disfrutar el juego.
Ayer eché unas cuantas partidas hasta subir a diamante en estándar. En 2 de mis últimas 3 partidas contra sacerdote sombras perdí en el turno 4. Pero perder de que me mataron, no de que concediera. Y eso en estándar, que luego nos quejamos de Wild pero telita con estándar también.
1/3 de partidas contra druida, sea aggro o Kazakusan. Si es Kazakusan y juega Guff pronto pierdes casi seguro como juegues algo controlero (estoy bastante cansado de la magia doble de 8 de maná haz 14 daños a la cara del rival y pon 7 2/2 en la mesa, la de coste 5 que pone 3 serpientes con renacer, embestir y veneno en mesa y la magia que hace 7 daños a todos los enemigos)
No sé, yo es que no entiendo quién es la cabeza pensante que decide la creación de estas cartas. El meta antes del miniset era decente, mucho combo pero decente. Ahora es una cosa vergonzosa.
Kazakusan tendría que haber sido una carta highlander o, como han sugerido otros, que el texto sea "por cada dragón que hayas jugado esta partida descubre un tesoro", no simplemente no tener esbirros que no sean dragones (como si tener esbirros para el druida fuera relevante) y meter directamente 5 tesoros duplicados rotísimos.
Y en Wild pues similar por culpa del guerrero piratas, el chamán Espantagón y los druidas.
Cada día que pasa me dan más ganas de dejarlo. Pero a un mes y medio de la rotación habrá que aguantar... pero ojalá me sigan dando las mismas excusas en 2 meses porque cada vez estoy más decidido de dedicar mi tiempo sólo a Battlegrounds