En una entrevista concedida a
GamesIndustry, Jim Ryan, director ejecutivo de PlayStation, ha hablado sobre la situación de PlayStation Studios, la red de equipos de desarrollo que desde hace décadas nutre de contenido
first-party a las consolas de Sony. El directivo ha defendido con vehemencia su apuesta por el crecimiento orgánico, pero sin cerrar la puerta a posibles adquisiciones. Un modelo que contrasta con el de Microsoft, que lleva años comprando desarrolladores para alimentar Xbox Game Studios.
Ryan dice que no se ha apreciado o entendido hasta qué punto PlayStation Studios ha hecho crecer de forma orgánica su capacidad para desarrollar juegos en el transcurso de esta generación. El directivo recuerda que la
adquisición de Insomniac Games ha ayudado. También propone hacer el ejercicio de recordar la alineación de títulos
first-party que tuvieron el día de lanzamiento PlayStation 3 o PlayStation 4 para cotejarla con la de PlayStation 5. “Simplemente no hay comparación”, sentencia Ryan.
PS3 se puso a la venta con Resistance: Fall of Man como estandarte, mientras que para arropar a PS4 Sony puso a la venta Killzone Shadow Fall y Knack. Para el lanzamiento de PS5 la alineación de títulos
first-party estará compuesta por Marvel's Spider-Man: Miles Morales (que añade Spider-Man Remastered con la Ultimate Edition), Sackboy: A Big Adventure y Demon's Souls. Además, la consola incluye Astro's Playroom, un título para explorar el uso del mando DualSense y que ofrece entre 4 y 5 horas de juego.
Insomniac Games también trabaja en Ratchet & Clank: Rift Apart, que aún no tiene fecha de lanzamiento “Esto no es el fruto de un gran gasto, sino de un crecimiento orgánico muy, muy constante y cuidadosamente planificado”, dice Ryan. El directivo afirma que Naughty Dog (Uncharted, Jak and Daxter, The Last of Us) es un ejemplo de esta expansión estructurada, pero también menciona a Sucker Punch Productions, el equipo de desarrollo responsable de Ghost of Tsushima. Ryan defiende que la formación de equipos que ha logrado PlayStation Studios es fruto del trabajo de “años y años”.
Ryan no lo menciona, pero parece evidente que sus palabras son un dardo hacia a la política de Microsoft, que durante los últimos años ha realizado una gran inversión para ampliar la capacidad de desarrollo de Xbox Game Studios. La compra más sonada es la de
Bethesda Softworks (Doom, Quake, Dishonored, Fallout, Prey, Starfield y The Elder Scrolls) por 7.500 millones de dólares, pero también ha sumado
Double Fine,
inXile, Obsidian,
Ninja Theory, Playground Games, Undead Labs y Compulsion Games.