Sony ha compartido un seminario técnico de PS5 Pro donde el arquitecto Mark Cerny ha revelado los detalles técnicos de la consola, que tiene como tridente de ataque una GPU mejorada, trazado de rayos avanzado y PlayStation Spectral Super Resolution (PSSR), una mejora de escalado basada en IA. Sony también ha hablado de su asociación con AMD para decir que han iniciado una colaboración más a fondo "en la que nos centraremos en tecnología basada en el aprendizaje automático para los gráficos y la jugabilidad". Este proyecto conjunto entre Sony y AMD recibe el nombre en clave Amethyst.
A nivel de hardware, la gran apuesta de PS5 Pro pasa por aumentar el rendimiento de la GPU, que sigue basándose en la arquitectura RDNA 2 (serie RX 6000) de AMD, pero con algunas características de RDNA 3 (serie RX 7000) y RDNA 4 (futura serie RX 8000). Su velocidad de reloj base es de 2,17 GHz y es capaz de ofrecer un rendimiento de 16,7 teraflops, que se comparan con los 10 teraflops de la PS5. Sus especificaciones también dicen que tiene 30 WGP, que son 60 unidades de cálculo, y puede llegar a una velocidad de reloj máxima de 2,35 GHz que en condiciones normales no se alcanza.
PS5 Pro no adopta una arquitectura RDNA más reciente debido a que el código de sombreado de la GPU de PS5 no funcionaría en el futuro hardware de AMD y la consola no es capaz de volver a compilar esos sombreadores en los juegos existentes. En consecuencia, PS5 Pro usa RDNA 2 vitaminado para añadir nuevas funciones como el trazado de rayos avanzado. Respecto a la memoria, tenemos 2 GB de DDR5 adicionales. Uno es para los desarrolladores, mientras que la memoria GDDR6 es un 28 % más rápida en comparación a la que usa PS5 (576 GB/s frente a 448 GB/s), a pesar de que su bus de 256 bits es similar.
Gracias a las mejoras en la GPU, los desarrolladores pueden usar las funciones de trazado de rayos con más alegría sin sacrificar la calidad de imagen o el número de fotogramas por segundo. De ellos depende cómo gestionar los recursos. Aquí entran las extensiones de la arquitectura RDNA 2, que incluyen acelerar las unidades de mapeo de texturas y soporte para la estructura de datos BVH8, que se usa para acelerar los cálculos del trazado de rayos (intersecciones, colisiones...). RDNA 2 y 3 usan BVH4. En consecuencia, PS5 Pro está mucho mejor preparada para lidiar con las funciones y cálculos del trazado de rayos.
La tercera pata del
big three es PSSR, una mejora basada en IA que utiliza tecnología basada en el aprendizaje automático, que se ha diseñado centrándose en la velocidad y en minimizar la cantidad de tiempo por fotograma que requiere el escalador.
El futuro de Sony y AMD pasa por Amethyst, un proyecto que tiene como objetivo crear una arquitectura mejor preparada para el aprendizaje automático que sea capaz de procesar redes neuronales. En especial, interesa que sea buena en las redes neuronales convolucionales. Las redes neuronales son un subconjunto del aprendizaje automático y las convolucionales usan datos tridimensionales para tareas de clasificación de imágenes y reconocimiento de objetos. Los resultados posiblemente los veamos con PlayStation 6 y más allá, pues la idea es que Sony y AMD usen de forma independiente el fruto de esta colaboración a largo plazo.
Fuente: EuroGamer